Arévalo y Lorenzo festejan las amplias mayorías absolutas del PP en Mos y Porriño

Nidia Arévalo y Alejandro Lorenzo festejaron ayer sus holgadas mayorías absolutas. Los dos cabezas de lista del Partido Popular en Mos y Porriño, respectivamente, alzaron el bastón de mando para continuar con sendos gobiernos populares en los próximos cuatro años. Arévalo lo hará con diez concejales, y Lorenzo con la insólita cifra de dieciséis, un hito en la historia de Porriño que no se quiso perder el presidente gallego del PP, Alfonso Rueda, presente en el pleno de investidura.

La primera en levantar el bastón de mando de su cuarta mayoría absoluta consecutiva fue la alcaldesa de Mos. En su discurso, Arévalo, que lleva ya 15 años al frente del Concello de Mos, adelantó los ejes de su gestión prevista para la próxima legislatura, que estará basada en “seguir construyendo y mejorando el Mos que queremos, con más vivienda pública y el macro proyecto sociosanitario pionero en España del Rebullón”. Prometió “continuar la transformación de Mos y seguir llevando a Mos a los más alto”.

La investidura de Alejandro Lorenzo tuvo lugar por la tarde y, aunque se preveía una gran celebración a tenor de los resultados electorales, con dieciséis concejales del PP de los veintiuno que tiene la nueva Corporación, el acto estuvo empañado por el fallecimiento de la abuela del alcalde en la madruga de ayer, a quien Lorenzo, visiblemente emocionado, dedicó parte de su intervención.

El líder de los populares de Porriño estuvo arropado por el presidente del PP de Galicia, Alfonso Rueda; el presidente del PP de Pontevedra, Luis López; y el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, entre otros miembros del partido; así como por los más de trescientos vecinos y vecinas que asistieron a la investidura, que abarrotaron el reducido salón de plenos, o que lo siguieron a través de la pantalla instalada en la Plaza del Concello por tal motivo.

Tras tomar posesión como alcalde, Lorenzo prometió gobernar Porriño con “compromiso y responsabilidad”. “Será un gobierno de trabajo, marcado por tres prioridades absolutas: el primero, O Porriño; el segundo, O Porriño; y el tercero, O Porriño”, apuntó, deshaciéndose en agradecimientos a su partido, a sus compañeros, amigos, familia y pareja y, en especial, a su padre, de quien dice haber heredado “los valores más importantes: sencillez y humildad”; y a su abuela y madrina, fallecida ayer. “Abuela, te quiero como nunca”, acertó a decir para acabar con un “Viva O Porriño”.