Una ocasión para ganar tranquilidad

El Celta de Rafa Benítez es un vaivén de emociones. Esta semana toca afrontarla con alegría después de que el equipo celeste ganase por goleada ante Osasuna (0-3), a pesar de presentarse en el Sadar con el once más conservador de lo que va de temporada, con Larsen como único delantero. La fórmula funcionó, gracias sobre todo a una gran intervención de Guaita en los minutos iniciales, por lo que es muy probable que Benítez la repita hoy en el Coliseum de Getafe (14 horas, Dazn), un campo que casi siempre ha resultado complicado para los celestes. Pero el equipo vigués viaja con la euforia de Pamplona y se le presenta una gran oportunidad para ganar tranquilidad. Una victoria ante el equipo de José Bordalás llevaría al Celta a ampliar hasta seis puntos la diferencia con los puestos de descenso después de que el Cádiz cayese el viernes en casa ante el Betis (0-2). El objetivo de los célticos parece complicado, a priori, teniendo en cuenta el aguerrido fútbol que practican los azulones, a los que Benítez acusó de la pérdida excesiva de tiempo en la primera vuelta en Vigo. Entonces, ambos se repartieron los puntos (2-2) después de que los madrileños jugasen en inferioridad numérica durante una hora.

Los viajes conectados de Larsen y Mayoral

Cuatro meses después nada es lo que era. El Getafe abandonó hace tiempo la zona de peligro y con 30 puntos piensa más en objetivos ambiciosos que en posibles complicaciones en la tabla, después de distanciarse 13 puntos de los puestos de descenso. Bordalás, además, maneja un grupo incluso más compacto, fiable y con mayor pegada que entonces, en el que destacan un Borja Mayoral que igualó a Bellingham y a Dovbyk como pichichi de LaLiga y a un Mason Greenwood que se ha convertido en una de las sorpresas del campeonato. La perla inglesa ha encontrado acomodo al sur de Madrid tras sus problemas con la justicia de su país y al que Bellinghan llamó supuestamente violador durante un duelo reciente en el Bernabéu.

En el mercado de invierno, Bordalás perdió cuatro piezas importantes: Enes Ünal (Bournemouth), Stefan Mitrovic (Genk), Anthony ‘Choco’ Lozano (Almería) y Damián Suárez (Botafogo). Para compensar, el club ha incorporado a los jóvenes Yellu Santiago, pivote procedente del Valencia, y a Ilaix Moriba, otro centrocampista que salió de la cantera del Barcelona.

El Celta, por su parte, ya disfruta de los refuerzos de invierno: Manquillo y Jailson tuvieron una buena actuación en El Sadar, donde debutó un Tadeo Allende que ha sorprendido en Afouteza por su potencia y velocidad, mientras que Benítez también espera que aporte goles. En esa faceta destaca sobre todos el noruego Strand Larsen, que ante Osasuna abrió el marcador con un gran remate y dio la asistencia para que Luca de la Torre se estrenase como goleador en LaLiga. El tercero llevó la firma de un Douvikas que ya suma 10 goles con la celeste (6 de ellos en la Copa, donde sigue como máximo goleador del torneo). Con este arsenal, una leyenda como Iago Aspas ha de acostumbrarse a vivir más tiempo en el banquillo de lo que esperaba cuando va camino de los 37 años. No jugó ni un solo minuto el moañés ante Osasuna, por decisión técnica, y es probable que tampoco aparezca en el once inicial en el Coliseum, donde Benítez podría repetir el equipo de la semana pasada, con Manquillo, Tapia, Unai Núñez, Carlos Domínguez y Ristic en la defensa; con Mingueza, Beltrán, Jailson y Luca de La Torre en el centro del campo, y con Larsen en ataque. Guaita, que regresa al equipo en el que vivió una gran etapa de su carrera deportiva antes de marcharse a Inglaterra, se reencontrará con una afición que ha acogido de nuevo a un Óscar Rodríguez que la temporada pasada vistió la celeste con menos brillo del esperado.

En la convocatoria de Benítez vuelve a entrar Carles Pérez, del que prescindió para Pamplona. Se cae de la lista Carlos Dotor, con problemas de pubis, mientras que Williot Swedberg continúa de baja y Jonathan Bamba afrontará hoy con Costa de Marfil la final de la Copa de África.

Suscríbete para seguir leyendo