“Karlotta” zarandea la comarca de O Salnés con vientos de hasta 115 kilómetros/hora
Una racha destrozó la carpa de Carnaval instalada en la plaza de O Regueiro | Árboles, contenedores, elementos de fachadas y hasta el letrero de una gasolinera acabaron en el suelo
El mar supera el paseo marítimo de A Illa en la zona de O Portiño. | // NOÉ PARGA / A. G.
Viento y lluvia por toda la comarca provocaron ayer un sinfín de incidencias que obligaron a los servicios de emergencias a trabajar de forma intensa durante toda la jornada. “Karlotta”, el nombre elegido para este temporal, rugió desde la madrugada, aunque sus efectos más devastadores ocurrieron sobre las 14.00 horas, cuando las precipitaciones fueron más intensas y se llegaron a registrar vientos de hasta 115 kilómetros por hora, racha recogida en la estación meteorológica que Meteogalicia tiene en As Sinas, Vilanova de Arousa. En esa misma estación se llegaron a recoger hasta 52 litros de agua por metro cuadrado. Esa cifra fue superada por la estación de Monte Castrove, donde se recogieron más de 66 litros por metro cuadrado.
La torres con los precios de la gasolina de Cambados. / Noé Parga
La furia del temporal se notó de manera especial en el mar, sobre todo, cuando subió la marea, dejando imágenes espectaculares en los paseos marítimos de A Illa, que las olas barrieron de forma espectacular. En ese municipio, el viento se llevó por delante la estructura de la carpa que iba a acoger las celebraciones del Carnaval. La estructura estaba situada en la plaza de O Regueiro y se vino abajo con la intensidad del viento. También en las inmediaciones del colegio Torre-Illa se registró un problema con un árbol, mientras en la zona de Os Carballos se vino abajo otro.
Carpa derribada por elviento en A Illa. / Noé Parga
En Vilagarcía, la caída de un árbol se llevó por delante un vehículo que estaba estacionado. Ocurrió en la calle Xunqueira, mientras que en la zona del Castro Alobre, otro árbol acababa dañando la terraza de un piso de la calle Vista Alegre. A estas caídas de árbores se sumaron los problemas registrados en fachadas y cornisas, donde se desprendieron varias paneles. El Servizo de Emerxencias de Vilagarcía tuvo que movilizar varias dotaciones para poder hacer frente a la gran cantidad de incidencias que se registraron, especialmente entre las 10,00 y las 14.00 horas.
En Cambados, el viento también provocó muchos problemas, llegando a derribar los paneles publicitarios de la avenida do Salnés, que se acabaron estrellando contra una furgoneta que se encontraba estacionada, causándole importantes daños materiales. No muy lejos de allí, el viento también se llevó por delante la torre de precios de la gasolinera de A Cabana y en Covas de Lobos hubo que cortar una carretera secundaria a la circulación después de caerse todo el tendido telefónico encima, siendo retirados por el Servizo de Emerxencias municipal.
La caída de un árbol obligó a cortar la circulación ferroviaria entre Pontecesures y Catoira
“Karlotta” dio problemas desde primera hora de la mañana, provocando incidencias de todo tipo. Lo saben bien los viajeros del tren que sale de A Coruña, con destino a Vigo, a primera hora de la mañana, que llegaron tarde a su trabajo o a sus clases debido a que un árbol se cayó encima de la vía entre las paradas de Pontecesures y Catoira. El tren debía arribar a Vigo a las 7.40, pero no lo hizo hasta las 9.04, con casi noventa minutos de retraso. El conductor del convoy informó de lo que estaba aconteciendo a sus pasajeros en todo momento y retrocedió con el tren hasta Pontecesures hasta cambiar de vía y retomar su camino. Los pasajeros que iban en su interior estuvieron en todo momento informados, pero no así los que se encontraban en las estaciones posteriores a la de Catoira, que se encontraron con que el ferrocarril acumulaba un importante retraso a causa de la caída de un árbol, pero no se les ofreció ningún tipo de solución, ni siquiera un transporte alternativo, como acostumbra a suceder cuando se producen situaciones de estas características. Algunos viajeros intentaron subirse al segundo tren de la mañana, pero acabaron siendo expulsados por el personal de Renfe en Pontevedra, obligándoles a aguardar por el tren para el que poseían billete. El tren de primera hora de la mañana no fue el único que se vio afectado por el retraso. Varios ferrocarriles acumularon hasta quince minutos durante la mañana, supuestamente por cuestiones derivadas de la caída del árbol en Catoira.
En Vilanova también se vieron obligados los efectivos de Protección Civil a cortar dos carreteras secundarias en Currás y Corón por la caída de árboles, además de actuar en bolsas de agua que se crearon en varios puntos del municipio.
Los Bombeiros de O Salnés de Vilagarcía tuvieron que acudir a un desprendimiento de una estructura metálica en la fachada de un edificio de cinco plantas en Catoira. Sin camión autoescalera debido a una avería, los bombeiros tuvieron que recurrir a desprenderse con cuerdas por la fachada para solucionar la situación. Situaciones similares se repitieron por toda la comarca, especialmente el desplome de árboles y de postes del tendido telefónico, que acabaron sucumbiendo a la fuerza del viento.
El principal río que atraviesa la comarca, el Umia, también sufrió las consecuencias del temporal, al desbordarse en la zona de Ponte Baión, donde volvió a cubrir con un gran manto de agua los campos circundantes.
El viento no respetó a los líderes políticos
Las fuerzas de la naturaleza no se paran ante nada, ni siquiera ante una campaña electoral como la que se está viviendo en Galicia. La cartelería utilizada por los partidos soportó, a duras penas, el fuerte viento, volando más de un cartel por el aire. El viento no distinguió tampoco entre partidos políticos, ya que todos sufrieron su virulencia. Sin embargo, la situación más grave fue la ocurrida en Cambados, cuando volaron dos paneles publicitarios con estructura metálica. En uno de ellos se encontraba un cartel electoral de Vox, que acabó totalmente destrozado al impactar contra el suelo y contra una furgoneta que se encontraba estacionada en la zona de la avenida de O Salnés.
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