Vecinos de Barrantes y el Arzobispado reclaman como suya una misma capilla

La asociación de vecinos de Barrantes llevó un desagradable disgusto cuando un hombre acudió al Registro de la Propiedad para registrar una finca suya y, a raíz de ese procedimiento, se supo que el centro social y la capilla de San Isidro aparecían en el Catastro a nombre del Arzobispado. Buceando en la documentación antigua, el presidente del colectivo vecinal, Juan Blanco, descubrió que en su momento los vecinos no registraron ninguna de las dos construcciones. Tienen que hacerlo ahora, pero en el caso de la capilla se han encontrado con el problema que el Arzobispado también sostiene que forma parte de su patrimonio.

La asociación ha convocado para hoy sábado por la tarde una asamblea extraordinaria en la que explicará a los vecinos en qué situación se encuentra este litigio administrativo. Juan Blanco explica que a finales de la década de los 70 la familia Cebrián Sagarriga, que ostentaban entonces el condado de Barrantes, donaron a los vecinos un extenso terreno en el que estos construyeron un centro social y una capilla. No obstante, parece ser que hubo dos donaciones, una privada, a favor de los vecinos, y otra pública, en la que figuró como beneficiario el cura párroco. Y este, al parecer, pasó la donación a nombre del Arzobispado.

El presidente de la asociación San Andrés explica que en el caso del centro social el registro ya está encarrilado. En lo que respecta a la capilla, confía en que también se pueda hacer sin problema, puesto que según él, el terreno donado tenía la consideración de masa común y, en consecuencia, tiene que ser de dominio público. Para demostrar este extremo ha solicitado a la Xunta de Galicia un certificado, pero le han indicado que todavía puede tardar medio año en llegar.

La asamblea está convocada para las cinco de la tarde en primera convocatoria, y para las 17.30 horas en segunda. La directiva anima a los socios a acudir dada la importancia de los asuntos a tratar (también se dará cuenta de la situación económica del colectivo), y habrá al final de la reunión un aperitivo y un vino para los asistentes, así como música con Os Carballeiras.

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