Mal olor y suciedad en el río Chanca por el desagüe de una cañería general

El fétido olor era perceptible en la zona en la que desemboca la tubería mixta EHace años que se reproduce la situación

Tubería por la que llegan aguas fecales al río Chanca. |   // T.H.

Tubería por la que llegan aguas fecales al río Chanca. | // T.H. / Tino Hermida

Tino Hermida

Una cantidad ingente de aguas fecales vierten desde hace varios días al río Chanca en el lugar de Abuín (Dena), según ponen de manifiesto los vecinos. Y es que tras las lluvias se registró una importante obturación en el colector de la red de saneamiento en este punto, que responde a un mal endémico que no se solventa desde hace más de una década. Dicho colector transporta las aguas de las parroquias de Simes, Lores, Meaño y parte de Dena, además de las que discurresn desde el polígono industrial de Nantes (Sanxenxo) en dirección a la EDAR de Os Pasales por la ribera del Chanca.

El vertido se localiza en un punto intermedio entre el puente de Abuín y la pontella de Viliquín, e inmediato al río Chanca, cuando la construcción de la red se acabó disponiendo un aliviadero, por el que se da salida a las fecales en caso de saturación. Y esta se reproduce cada invierno a raíz de una conexión de las pluviales al colector de fecales, como se explicó en anteriores ocasiones.

Colectores colapsados

Es con la llegada de las lluvias en invierno cuando los colectores se colapsan y también la propia EDAR de Os Pasales, obligando, en ocasiones, a la apertura de compuertas en la ensenada de Dena, con el daño que se causa al entorno y el fétido olor en la zona.Con las lluvias de estas últimas semanas y con el río al límite de su capacidad, se atisbaba ya el vertido por el aliviadero. Una vez que ha bajado el caudal en estos últimos días, se evidencia ya el problema que puede verse desde la misma vera del río.

El primero en denunciar estos vertidos fue el entonces presidente de la asociación de vecinos Santa Lucía de Dena, Nemesio Viñas, quien se hacía eco de la situación en 2016. Desde entonces y en repetidas ocasiones se han venido sucediendo quejas similares, lo que provocó incluso la interposición de sucesivas denuncias ante el Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil). Pero en todo este tiempo no se procedió con una actuación que supusiera solución alguna.

En continuas intervenciones, por parte de operarios municipales, se procedió a la retirada hasta de piedras acumuladas en el interior del colector, que se habían ido sedimentando en este punto en que la canalización discurre prácticamente llana.

Recomendaciones

Atrás ha quedado -y olvidada- la solución propuesta entre los concellos de Meaño y Sanxenxo, para dotar el tramo entre Abuín y Os Pasales de una tubería con sección de 500, con mayor capacidad en detrimento de la actual que es de 300, si bien se temía a la pendiente de caída que, técnicamente, oscila 0,50 y 0,70 centímetros por cada 100 metros, por lo que se consideraba insuficiente en aquel entonces.

Pero ni una ni otra se aplicó y el proyecto atisbado hace casi una década quedó aparcado, sin que se sepa cuando se retomará esta u otra solución que resuelva el problema medioambiental.

La situación, ya endémica, se agudizó cuando entró en marcha el polígono industrial de Nantes, que suma una cantidad importante de agua a un colector ya de por sí saturado.

Desde entonces el polígono industrial de Nantes sigue vertiendo conectado al colector meañés sin licencia reglada aprobada por el Concello, por lo que, a día de hora sigue rigiendo una licencia de vertido provisional por obra que data de finales de los 90, explican los vecinos consultados.

Pese a que la oposición volvió sobre el tema de este enganche irregular a lo largo de los últimos años, el gobierno local todavía está a la espera de encontrar una solución definitiva.

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