La alianza con los trabajadores del mar es esencial en la lucha contra la basura marina, ya que ellos son los guardianes de nuestros mares”. Eso es lo que cree la conselleira de Mar, Rosa Quintana, y eso es lo que ha dicho esta mañana por videoconferencia, en el evento final del proyecto europeo “CleanAtlantic”, participado por cofradías de pescadores como las de Cambados y A Illa de Arousa que iniciaba su andadura en septiembre de 2017.
Fueron una veintena las organizaciones de España, Francia, Portugal, Irlanda y Reino Unido, implicadas en esta iniciativa mediante la que “buscar la protección de la biodiversidad y los servicios ecosistémicos por medio de la mejora de las capacidades de prevención, seguimiento y eliminación de la basura marina en el espacio Atlántico”.
“La alianza con los trabajadores del mar es esencial en la lucha contra la basura marina, ya que ellos son los guardianes de nuestros mares”
El Cetmar, el Intecmar , la Universidad de Santiago de Compostela (USC), Gardacostas de Galicia e incluso el colegio y el instituto de A Illa, además de investigadores de los centros gallegos del Instituto Español de Oceanografía (IEO), figuran entre los gestores del “CleanAtlantic”, mediante el cual “Galicia se sitúa como un gran ejemplo a nivel europeo en la lucha contra la basura marina”, abunda la conselleira.
Lo hace desde el convencimiento de que es necesario poner fin a “un problema” extremadamente grave que afecta a todos los mares del mundo, como también a las rías gallegas.
De ahí que esta lucha lleve “más de una década en la agenda de Galicia, pues cuidar el mar supone cuidar un patrimonio natural y un sector del que estamos orgullosos”.
Esto explica el por qué de ejecutar proyectos de los que se habla, y mucho, en las últimas semanas en FARO DE VIGO, como el “Acuieco”, “Mar Limpo”, “Pescal”, “3R Fish” y otros como el “Marine Litter Style”, centrado en la valorización de basuras marinas y residuos inorgánicos para la industria textil, y el “Nada por la borda”, que se desarrolló hace una década en colaboración del sector pesquero y portuario para favorecer “la recogida y caracterización de la basura marina”.
“Marlimpo”, por ejemplo, se lleva este año un presupuesto de 980.000 euros. Cantidad que se dirige, a modo de subvención, a cofradías de pescadores, agrupaciones de bateeiros y todo tipo de entidades asociativas del sector y Grupos de Acción Local del Sector Pesquero (GALPs).
También del “CleanAtlantic”, con el que queda patente “la importancia de una cooperación integral para avanzar en la prevención, seguimiento y eliminación de la basura marina, así como la trascendencia de la colaboración trasnacional en un objetivo en el que tiene un gran papel el sector pesquero”, reseñó Quintana.
Al hablar de estas y otras iniciativas desarrolladas en Galicia en la última década, para luchar por la preservación del medio marino, la titular de Mar incidió en aquellas que “permitieron realizar un diagnóstico de los residuos generados por la actividad pesquera y portuaria y analizar las posibles alternativas de gestión de esos residuos”.
El proyecto europeo “CleanAtlantic”, sin ir más lejos, trató de “mejorar las capacidades para prevenir, hacer seguimiento y reducir la basura marina en la zona del Atlántico”; además de querer “aumentar la sensibilización entre los actores marítimos a través de la cooperación regional”.
"CleanAtlantic": Prevención, seguimiento y eliminación
Este proyecto se marcó como hoja de ruta pasos como “describir la situación actual, el conocimiento existente, los datos disponibles e iniciativas llevadas a cabo en las regiones atlánticas”.
Al igual que proponía “revisar los sistemas actuales de monitorización y registro de basuras marinas y proporcionar protocolos, herramientas e indicadores para garantizar una monitorización adecuada”.
Con el “CleanAtlantic” también se desarrollaron “herramientas de modelización para predecir el origen, circulación y destino de la basura marina”, al tiempo que se abordó la prevención “mediante el desarrollo de buenas prácticas para reducir la basura procedente de los sectores pesqueros y portuarios”.
La aplicación del programa europeo en Cambados y el "rastro da vieira"
A finales de 2019 la Consellería do Mar presentaba el “CleanAtlantic” en Cambados, dándolo a conocer como un programa de ámbito europeo tendente a luchar contra la contaminación marina que, en este caso concreto, iba a permitir emplear el popular aparejo conocido como “rastro da vieira”, a modo de herramienta mediante la que retirar del fondo de la ría plásticos, cuerdas, viejas redes, nasas abandonadas y todo tipo de desperdicios.
La directora del Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino (Intecmar), Covadonga Salgado, se encargaba de incidir en que este programa europeo, desarrollado en colaboración con la flota de arrastre cambadesa, trataba de “prevenir, monitorizar y reducir la basura marina a través de la cooperación regional”.
De ahí que se pusieran en marcha “acciones piloto dirigidas a estudiar las condiciones operativas y logísticas más adecuadas para la retirada de basura marina, con la colaboración del sector pesquero”.
Al igual que se trataba de determinar “las capacidades de los diferentes aparejos de pesca para llevar a cabo estas actuaciones de limpieza”; de ahí el empleo de “rastro de la vieira” en el puerto cambadés.
De este modo se daba continuidad a la campaña de retirada de residuos del fondo marino desplegada unas semanas antes por la flota de “bou de vara”, procediendo en aquella ocasión a la eliminación de cerca de 3.000 kilos de residuos.
Todo ello para favorecer la eliminación de residuos marinos implementando iniciativas de “pesca de basura”, es decir, retirando de la ría aparejos de pesca abandonados, perdidos o descartados, además de desarrollar “las prácticas más adecuadas para limpiezas rutinarias de basura en las playas por parte de las autoridades locales”.
El papel de Mexillón de Galicia y "Acuieco"
Como se indicaba anteriormente, al hablar de la lucha contra la contaminación marina cabe tener muy presente al Consello Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Mejillón de Galicia, que sigue dando pasos importantes en pro del desarrollo sostenible y el objetivo “cero residuos”. Su departamento de I+D+i lleva tiempo trabajando en la búsqueda de fórmulas que reduzcan el impacto de la actividad, al igual que lo hacen centros de investigación públicos y privados como los antes aludidos.
Entre todos buscan el modo de revalorizar la concha sobrante, tratan de reutilizar los restos generados tras la manipulación del molusco en depuradoras, cocederos y conserveras, y quieren encontrar la forma de evitar que los palillos, sacos de plástico, cuerdas de cultivo y demás elementos acaben convertidos en basura marina.
De esta última línea de trabajo forman parte proyectos como el titulado “Acuicultura sostenible y economía circular” (Acuieco), con el que “reducir el impacto en el medio ambiente de la actividad bateeira, facilitando también una producción más sostenible”.
En el Consello Regulador Mexillón de Galicia, presidido desde hace cuatro meses por Lina Solla, aseguran que, gracias al mismo, “en los últimos meses se ha recopilado información muy interesante” sobre el modo de trabajar el mejillón en las bateas y los puertos.
Un cambio de hábitos y pruebas piloto en la ría
El proyecto "Acuieco", que se encuadra en la hoja de ruta del programa europeo Pleamar, a su vez cofinanciado por el FEMP, promueve un cambio de hábitos, tratando de reducir el impacto ambiental, mejorar el uso sostenible de los recursos, fortalecer la colaboración entre agentes de I+D+i y el sector acuícola y visibilizar la igualdad de género.
Impulsó, por ejemplo, la realización en la ría de Arousa de pruebas piloto para determinar la efectividad de las medidas propuestas, centradas en la reducción de la pérdida de los palillos que se usan en las cuerdas de cultivo –para repartir el peso de la piña de molusco y evitar perder toda la producción en caso de desprendimiento– y en determinar la vida útil de las propias cuerdas, sogas y sacos plásticos empleados.
Impulsado por el propio Consello Regulador y avalado por la Fundación Biodiversidad, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, el Acuieco hizo que el pasado mes de noviembre se adjudicara a la empresa pontevedresa Equilátero Desarrollo Sostenible Consultores la prestación de los servicios correspondientes al mismo.
El objetivo, como se explicó entonces, no era otro que desarrollar actividades como la realización de un diagnóstico del proceso productivo del molusco, estudiando los materiales que se emplean y sus características en las fases de obtención de mejilla, encordado, desdoble y cosecha.
A Equilátero Consultores se le encomendaba entonces detectar e inventariar los puntos o acciones que conllevan pérdida de materiales durante el proceso de laboreo, tales como los palillos, las cuerdas y los sacos que se emplean en el cultivo y comercialización del molusco.
El proyecto "Gestinmer" y la "Guía de buenas prácticas y gestión de los residuos"
Desde hace años se realizan estudios a nivel autonómico, estatal y europeo tendentes a desarrollar y ejecutar medidas correctoras capaces de acabar con la basura marina o, cuando menos, minimizar su impacto.
Puede citarse como ejemplo el proyecto "Gestinmer"; un plan para la gestión integral de los residuos de los cultivos de mejillón en batea participado por el Consello Regulador do Mexillón con el que se desarrolló la "Guía de buenas prácticas y gestión de los residuos" en el "laboreo", entendido éste como el proceso en el que se engloban la obtención de la semilla, encordado, desdoble y la fase de cultivo o desarrollo de la cosecha.
Como es lógico, durante las operaciones de laboreo se generan residuos, y estos "deben ser minimizados y gestionados correctamente para mejorar la sostenibilidad del cultivo", indicaba aquel informe.
De ahí la citada guía de buenas prácticas, con la que se plantearon alternativas "para la gestión de los residuos generados durante las labores de desdoble y de cosecha para la venta de mejillón en fresco".
Al igual que se ocupó de concretar las necesidades existentes para que la actividad mejillonera sea más sostenible en el marco de un sistema de economía circular, evitando generar residuos y favoreciendo su reciclaje.
Para ello, y tratando de disponer de mayores conocimientos y de llegar a conclusiones válidas, se han promovido encuestas y reuniones con investigadores y bateeiros, así como con las empresas de comercialización y, en definitiva, con todos los agentes directa o indirectamente implicados en el cultivo del “oro negro”.
Esta fase de consulta sirvió, por ejemplo, para tener “un mejor conocimiento de cómo se generan y se gestionan” actualmente los residuos propios de la actividad acuícola. Pero también para determinar dónde se localizan los principales focos y qué cantidades aproximadas se están produciendo.
Recogida de desperdicios a bordo
El proyecto "Gestinmer" llegó a la conclusión, como resultado del análisis de la generación de residuos de laboreo, de que "una alternativa viable" en la gestión de tales residuos es "la recogida de estos materiales a bordo de los barcos bateeiros en sacos adaptados a las diferentes maquinarias y el almacenamiento temporal de estos en plataformas flotantes".
De este modo, "una vez acumulado un volumen suficiente, los residuos serían trasladados a puerto en barco, para ser cargados directamente en los camiones que los transportarían a su destino final.
Paralelamente, “recorrimos los puertos para conocer nuestra flota y la singularidad de cada productor, lo cual nos permitirá mejorar las prácticas de cultivo y laboreo”, reflexionan en el órgano rector de la DOP Mexillón de Galicia.
El "sello azul MSC"
En noviembre de 2019 el Consello Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Mexillón de Galicia anunciaba su incorporación al proceso de evaluación Marine Stewardship Council (MSC), el único programa de certificación y ecoetiquetado de pesquerías de captura salvaje que cumple con los requisitos de mejores prácticas establecidos tanto por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO) como por ISEAL, la asociación mundial para estándares de sostenibilidad".
Esto era tanto como decir que comenzaba el proceso de certificación para que el mejillón protegido pueda lucir el "sello azul MSC", el cual se asienta sobre tres pilares básicos: "Sostenible, salvaje y certificado".
Es una marca que "solo se concede a pescado o marisco de captura salvaje procedente de pesquerías que han sido certificadas en base a indicadores científicos de pesca sostenible".
Pero eso no es todo, sino que, "a lo largo de toda la cadena de suministro, desde el mar al plato, el pescado y el marisco certificado por MSC se mantiene separado de otros productos no certificados y es etiquetado de forma clara, de manera que su origen puede ser rastreado hasta una pesquería sostenible certificada".
Y esa, la trazabilidad del "oro negro" de batea, es otra de las herramientas que desde su puesta en marcha maneja la DOP Mexillón de Galicia, de ahí su disposición a lograr un sello extra como el que ofrece MSC.