El alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, sigue incomodado con el malentendido producido el jueves en su visita al campamento de As Sinas cuando los niños, tras el grito de unos monitores, contestaron "Pokémon" o como él entendió, "Podemos".

"Lo que pasó allí no me gustó nada y la disculpa que me dio el monitor -que lo que habían dicho era una broma entre los chavales y que la repetían a menudo entre ellos- tampoco", dice Durán. Y añade: "Todavía estoy barajando poner una queja formal contra los monitores del campamento, porque el aleccionamiento a los niños no se puede tolerar".

El edil explica que lo que sucedió fue una muestra de una situación que "no es la primera vez que sucede y hay que vigilarlo. La educación debe ser totalmente imparcial, no se debe aleccionar a los niños porque después pasa lo que sucede, por ejemplo, en Cataluña o en las ikastolas -tipo de escuela del País Vasco en la que la educación es íntegramente en euskera-". Durán cree que si el grito que él escuchó en su visita al albergue fuese el de otro partido político sería un "verdadero escándalo". "Hay tolerancia con todo aquello que hace la izquierda y esto no puede ser", cuenta el alcalde de Vilanova de Arousa.

Además afirmó que estos comportamientos son propios de dictaduras "tanto comunistas como fascistas".

Del enfado del alcalde y de sus palabras tras la visita a los niños de As Sinas se hicieron eco las redes sociales e incluso las páginas oficiales de la asamblea "Podemos" compartieron la información y dejaron algún mensaje. "Parece que hay palabras que no son del agrado del señor alcalde", se podía leer, por ejemplo, en la página de Facebook de la asamblea de Vilanova, acompañando al link de la noticia de FARO.

Como grupo, la asociación Podemos no quiso hacer declaraciones ni opinar sobre las palabras de Durán ya que, afirman, deberían de hacer una asamblea y deliberar qué decir sobre ello. De manera personal, Juan Manuel Da Silva, miembro de Podemos de Arousa afirmó que las palabras del alcalde no le merecen ninguna importancia. "Está todo algo confuso, unos dicen que se dijo una cosa y otros que otra. Lo que diga este alcalde, la verdad, es que no me merece la pena ya que no es la primera vez que descalifica a las personas", dice Da Silva.