La ley del mar dice que aquello que aparece en la orilla es de quien lo encuentra, y eso han pensado ayer decenas de vecinos que en la playa de A Lanzada tuvieron la oportunidad de cargar en capazos cientos de piezas de centolla que les garantizan una buena y gratuita cena de Navidad.

El temporal de los últimos días hizo que el mar arrojara a la orilla, y no sólo en A Lanzada, sino prácticamente en todo el litoral de la península meca, una gran cantidad de aparejos de pesca, nasas y útiles ilegales como los "cacharros", con los que se pesca pulpo de manera furtiva.

Entre esos aparejos –muchos de ellos sin ningún tipo de identificación y utilizados habitualmente por los furtivos o pescadores clandestinos– están las grandes piezas de "miños" que ayer llegaron sobre la costa de A Lanzada, donde como queda dicho decenas de personas se lanzaron a por las redes para tratar de desenmarañarlas y extraer las piezas de centollo, seleccionando aquellas que aún estaban vivas.

Algunos se llevaron "una buena caldeirada", bromeaban los vecinos, sobre todo de O Grove y Sanxenxo, que presenciaron estos hechos y/o participaron en ellos.

Entre los que dieron cuenta del botín había empresarios, marineros y curiosos que pasaban por allí y no dudaron en sumarse a la improvisada "fiesta", pues se trataba de "unas buenas piezas de miños y una gran cantidad de centollos", aseguran.

Marineros profesionales consultados en relación con lo sucedido dicen que puede tratarse de aparejos que rompieron, pero sobre todo se inclinan por pensar que los propietarios de esos "miños" los "largaron" o calaron demasiado cerca de la orilla, y con el fuerte oleaje volvieron a tierra, pero no como querrían sus propietarios.

Canelas y Con Negro

La aparición de estos aparejos, hay que incidir, se produjo también en otros puntos de la costa meca, especialmente en la de San Vicente, expuesta a las embestidas del Océano Atlántico.

Puede decirse que también se localizaron nasas, "cacharros" de pulpo y restos de "miños" en playas como Raeiros, Canelas y Con Negro, por citar sólo algunos ejemplos.

Varias personas que ayer comprobaron la presencia de estos elementos sobre la arena bromeaban diciendo que "en otros temporales la fuerte marea solía arrojar sobre la orilla cartones de tabaco de contrabando o fardos de droga, pero esta vez el mar nos ha dado algo mucho más sano, como son las centollas". Episodios como el vivido ayer y en días previos, tanto en O Grove como en otros municipios de la fachada litoral gallega, sirven igualmente para localizar todo tipo de mamíferos marinos y tortugas varados sobre la arena, tal y como se informó ayer en base a los informes realizados por la Coordinadora para el Estudio de los Mamíferos Marinos (Cemma).