La capilla de leyenda que planta cara al Atlántico

Aunque está de espaldas al Atlántico, todos los días desde hace varios siglos le hace frente a su bravura. Recibe el envite de las olas que van a morir a la costa de Portugal en el área de Oporto. Y, aunque la segunda mayor ciudade del país vecino es una de las zonas más visitadas por los turistas gallegos, esta bella capilla de leyenda no suele estar en la agenda de todos. Probablemente por desconocimiento. Se trata de la Capela do Senhor da Pedra.

Ubicada a apenas hora y media de la frontera con Galicia, esta pequeña capilla se levanta a medio camino entre la arena y el mar. De hecho, el Atlántico no solo golpea contra ella cuanto sube la marea, sino que llega a inunuda por cimpleto sus pies cuando sube la marea.

Dónde está

La Capela do Senhora da Pedra está ubicada en el término municipal de Vila Nova de Gaia, a escasos kilómetros de la ciudad de Oporto. Y se levanta sobre un promontorio de rocas en la playa de Miramar.

Apenas llega a los 10 metros de altura, pero con tan corta estatura, esta capilla hexagonal que fue levantada en 1686 para cultos paganos planta cara día y noche al desafiante Océano Atlántico.

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A ella se puede acceder a través de una escalinata. Eso sí, cuando la marea está baja. De lo contrario, el agua dificulta —y muchas veces impide— llegar hasta ella, ya que el mar la rodea por completo. De hecho, uno de los mayores atractivos es ver desde su base cómo las olas rompen contra las rocas de su fachada oeste y sur.

Romería

Uno de los meses en los que la visita a la Capela do Senhor da Pedra puede ser más atractiva es en junio, cuando se celebra una romería durante tres días desde el Domingo de la Santísima Trinidad.

¿Cuál es su origen?

El origen de la Capela do Senhor da Pedra está marcado por multitud de leyendas. Una de las más extendidas apunta que los vecinos del Gulpilhares deseaban levantar una ermita cerca del arenal. Sin embargo, unas luces que vieron sobre las rocas, les llevaron a cambiar de idea y se levantó en su actual ubicación.

Otra de las teorías apunta a un marinero en peligro de muerte durante una tempestad y que habría prometido construir un templo a Cristo en aquel lugar en el que que consiguiera tocar tierra firme.

También se apunta a la intención de un párroco de esta freguesía de Portugal de poner fin a los ritos paganos que se celebraran en esta playa y, concretamente, sobre las rocas que hoy ocupa la Capela do Senhora da Pedra.