"Estoy vivo gracias a ella": la confesión más dura de Kiko Rivera

El dj ha vuelto ha sincerarse sobre la etapa más oscura de su vida

Kiko Rivera.

Kiko Rivera.

Kiko Rivera ha estrenado canción. Después del éxito de 'Mambo', ha dado la bienvenida a la primavera con la que podría ser una de las canciones del verano. 'Malibú' es el nuevo trabajo del hijo de Isabel Pantoja y la promoción de su nuevo single le está llevando a diferentes programas.

El DJ ha sido el último invitado de 'La de trabajar... ¿Te la sabes?', el pódcast que conduce Marina Rivers en Podimo donde han hablado de la familia.

"Es muy complicado, al final los prejuicios son una mierda, al ser hijo de Isabel Pantoja, una gran artista mundial, tienes que demostrar más que los demás y siempre me ha costado mucho", ha desvelado sobre como ha llevado la fama. "Me han tachado de flojo, de no trabajar y es costoso aguantar todo eso".

"Mi madre me tuvo muy reservado, no me dejaba salir mucho y no entendía por qué. Hoy puedo llegar a entender que era por miedo a que me pasase algo por ser su hijo, me costó mucho entenderlo y cuando cumplí 18 años, me marché de casa y no volví más", ha recordado.

 "Yo apenas nací, estaba ya en el telediario. Al estar tan acostumbrado a eso, hice lo mismo con mis hijas hasta que me di cuenta de que debería dejarlas elegir cuando sean mayores. Aunque sean mis hijas, nietas de Isabel Pantoja, que decidan qué rumbo quieren seguir y es la mejor decisión que hemos tomado."

También ha hablado sobre el veto de Telecinco y los problemas de salud que ha estado acarreando durante todos estos años. El DJ ha asegurado que "me vino genial". "Ahí mi vida da un vuelco y pude centrarme más en mi faceta de músico, porque el Kiko Rivera personaje estaba por encima siempre de mi faceta de músico o de DJ."

Esa vida también le ha llevado a vivir una de las etapas más complicadas en la que la fiesta y el desfase le acompañaban diariamente. "Me vi de tener 0 euros en mi cuenta a empezar a ganar muchísimo dinero. Llegué a gastar en mala vida 8 millones euros. Me he gastado mucho en fiestas, drogas y todo lo que está dentro del círculo vicioso".

"Hoy en día estoy limpio, tengo la mente directa a ser lo que quiero, quiero lo mejor para mis hijas y no quiero que cometan esos errores. Siento que sé de lo que estoy hablando", ha confesado. "Mi mujer me ha salvado y estoy vivo gracias a ella", ha terminado diciendo.