La icónica estrella de La Caixa que de entrada fue un tapiz

La decisión del artista de realizar el encargo de la entidad fue tildada de mercantilista

E. H.

¿Cómo es que Joan Miró accedió en 1979 a realizar el conocido logotipo de La Caixa, esa estrella azul con dos pequeños planetas, uno rojo y otro amarillo, a su lado? Algunos no entendieron la decisión del artista, que tildaron de mercantilista. Miró y La Caixa, en principio, podían parecer dos conceptos antagónicos si se tiene en cuenta que tiempo atrás el artista se había negado a que Cartier adaptara sus viejos dibujos de orfebrería. Miró, a sus 86 años, había sufrido una caída un año antes, lo que no frenó su espíritu crítico. Tuvo la rabia suficiente como para diseñar para el grupo La Claca los monigotes de Mori el Merma, una salvaje caricatura de Franco con el modelo de Ubú, rey, de Alfred Jarry.

Quizá por eso la petición de la entidad bancaria que buscaba modernizar su imagen debió ser estudiadamente esquinada para poder ser aceptada. La idea fue no pedirle al artista un logotipo comercial sino un tapiz, diseño del pintor y realizado por Josep Royo, en el que entre otros motivos aparecería la famosa estrella.

La empresa de márketing norteamericana que había propuesto el así denominado “concepto Miró” ya había propuesto una estrella de ocho puntas. La de Miró finalmente tuvo cinco puntas, pero para muchos su interpretación fue mucho más prosaica al querer ver en ella simplemente a una figura intentando meter unas monedas en una hucha.