A partir del 17 de agosto

La nueva vida de la princesa Leonor en la Academia Militar de Zaragoza

La princesa inicia este jueves su estancia en la Academia General Militar

Seguirá los mismos mandamientos que sus compañeros

La princesa Leonor, el pasado mes de julio, en su última visita a la AGM.

La princesa Leonor, el pasado mes de julio, en su última visita a la AGM. / ÁNGEL DE CASTRO

Redacción

La princesa Leonor se convertirá el próximo día 17 en la dama cadete Borbón cuando ingrese en la Academia General Militar (AGM) de Zaragoza, donde cursará el primero de los tres años de formación militar como una soldado más, lo que implicará compartir camareta con otras alumnas, comenzar la jornada a las 6.30 horas o disponer de pocos permisos.

Leonor de Borbón, que el próximo 31 de octubre cumple 18 años, tiene por delante una formación "dura y exigente", como se recoge en la bienvenida de la AGM, aunque en su caso, sólo estará un año en la General, en vez de los cinco habituales para ser teniente, y después proseguirá otros dos cursos en las academias de la Armada y del Aire.

La princesa pisará por primera vez la academia con indumentaria civil, "evitando el chándal, los pantalones cortos y calzado de playa", y sin demasiado equipaje, puesto que de inmediato se le entregará el ropaje militar que empleará mientras esté en el centro.

Los dormitorios son de dos, cuatro o doce plazas, sin que Defensa haya concretado en cuál estará Leonor de Borbón, y cuentan con baño, mesa de estudio y un armario para la ropa.

Las damas cadete con melena, como el caso de la princesa, deben llevarla recogida con un moño en las formaciones y en momentos de especial relevancia, mientras que en las actividades deportivas se autoriza peinarlo en coleta o en trenza, siempre que su longitud no sobrepase la altura de la axila.

La princesa se podrá maquillar con colores naturales que no contrasten en exceso con la propia piel, mientras que las sombras de ojos o el lápiz de labios serán de colores pálidos, y el esmalte de uña, transparente.

Están prohibidos los collares, las pulseras que cuelguen y los complementos, salvo un reloj o las gafas de ver, y se permiten los tatuajes si no se ven con el uniforme y si no son discriminatorios.

A la heredera al trono se le entregará el primer día "el decálogo del cadete", una suerte de guía moral que habrá de memorizar y marcará su forma de proceder durante la carrera militar. Entre sus mandamientos, "ser voluntario para todo sacrificio", "tener amor a la responsabilidad y decisión para resolverlo" o "no murmurar jamás, ni tolerarlo".

Al tratarse de un régimen de internado, la hija mayor de los reyes dormirá en la academia de lunes a jueves. La salidas están permitidas por las tardes, aunque en el caso de los nuevos alumnos, se subraya que el estudio es obligatorio, y tendrá libre los fines de semana siempre que no tenga actividades o maniobras.

Fuera de clase, los estudiantes pueden recibir tutorías, ir a la biblioteca, a la capilla o al casino de cadetes, una cafetería con mesas y butacas para poder pasar un rato de ocio.

El toque de diana es a las 6.30 horas y tras la lista de ordenanza y el arreglo de camaretas, la princesa desayunará con sus compañeros en el comedor. Las clases empiezan las 7.45 horas –los viernes a las 8.15– y terminan a las 14.20, la hora de la comida en el autoservicio, de nuevo en bancos corridos donde no están asignados los sitios.

Las normas de acogida no especifican nada sobre el uso de los teléfonos móviles, una de las preocupaciones que los reyes han tenido siempre en relación con sus hijas para preservar la intimidad y evitar que se publiquen imágenes personales.