La vacunación y el menor riesgo de hospitalización de la población que acapara la mayor incidencia de COVID-19, jóvenes y adolescentes, permiten que las restricciones que a partir del sábado afectarán a dos tercios de la población gallega sean mucho más leves que las de las anteriores olas. Esos 1,7 millones de gallegos que viven en los 60 concellos en nivel máximo o alto no sufrirán cierres perimetrales ni toques de queda, pero a partir de las 12 de la noche del viernes al sábado deberán presentar certificado de vacunación, de haber pasado la infección o test negativo para entrar en el interior de bares y restaurantes y no podrán reunirse con no convivientes entre la 1 y las 6 de la madrugada.
“La situación epidemiológica continúa empeorando, es mala”, admitió ayer el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, al presentar en Santiago las decisiones del comité clínico. Reiteró que se aplican con tasas ajustadas, que además del dato de incidencia acumulada incorporan el porcentaje de pacientes hospitalizados y de críticos en cada área sanitaria. De no aplicarse este factor de corrección, precisó el conselleiro, más de 200 concellos estarían en los dos niveles de restricciones más altas y con medidas aún más duras en vigor.
“Descartamos los cierres totales de las actividades económicas, hay amplios sectores de la población que pueden participar de ellas de forma totalmente segura”
Doce concellos, con una población total de cerca de 140.000 personas, estarán en el nivel máximo: Baiona, Muros, Burela, Foz, Viveiro y Monterroso se unen a Boiro, O Barco, Cambados, Meaño, O Grove y Sanxenxo. Como en el nivel alto, estarán prohibidas las reuniones de no convivientes entre la 1 y las 6 de la madrugada; el resto de horas, máximo de seis personas en el interior y de 10 en el exterior. Las terrazas, también al 50% de aforo; pero el interior de la hostelería abrirá al 30%, y siempre con exigencia de certificados COVID para los clientes.
En el nivel alto estarán 1,6 millones de personas de 52 concellos. Entre ellos, las siete principales ciudades, ya que a Vigo, Pontevedra y Ourense se unen A Coruña, Santiago, Ferrol y Lugo. Respecto al nivel máximo, la única relajación es que los interiores de la hostelería tendrán un límite del 50% del aforo en lugar del 30%.
Ya en el nivel medio estarán 52 concellos en los que habrá ocio nocturno hasta las 3, con exigencia de certificados, y después de esa hora y hasta las 6 se prohíben las reuniones de no convivientes.
El resto de los municipios, 201, estarán en nivel medio bajo, sin restricción de aforo en las terrazas.
Para toda la población sigue estando vigente la prohibición de reunirse más seis personas en el interior y de 10 en el exterior. Estos límites se pueden superar si se reúnen únicamente dos unidades de convivencia. Comesaña hizo hincapié en la importancia de respetar estos máximos y de no reunirse en los interiores de los domicilios por la noche.
El conselleiro dijo que la tasa de hospitalización “está lejos de valores preocupantes”, pero que sí preocupa “profundamente” tener 234 enfermos de COVID-19 en unidades de hospitalización y 30 en la uci. Entre ellos hay ingresados de 29, 30, 37 y 40 años, y en las unidades de críticos “la gran mayoría de pacientes no están vacunados”, apuntó.
Julio García Comesaña dijo que esta semana hay citadas más de 32.000 personas citadas para cribados, pero que la utilidad de estas pruebas desciende sensiblemente cuando no los que acuden no constituyen una amplia mayoría. Y puso un ejemplo: el fin de semana pasado menos del 50% de los citados respondieron a los cribados en Ribadeo, Viveiro y Foz; el primero se mantiene en el nivel alto de restricciones y los otros dos pasan al máximo.
El foco sigue estando en los jóvenes, ya que las franjas de edad entre 12 y 19 años y entre 20 y 29 presentan incidencias acumuladas a 14 días de 2.243 y 2.615 casos, respectivamente. La tasa del siguiente grupo etario con mayor es de 897 casos, prácticamente la tercera parte. Se trata de acelerar la vacunación, especialmente de los jóvenes, y el porcentaje de población diana con pauta completa es del 69%. “Estamos a un 1% de esa supuesta inmunidad de rebaño. Esa referencia no era buena”, dijo Comesaña, que citó un umbral mínimo del 90%.
Los jóvenes tienen, de media, más interacciones sociales que los mayores, por lo que el número de contactos estrechos por cada positivo se dispara hasta 20 o 30. Comesaña lamentó que “hay casos positivos que no señalan a todos sus contactos para salvarlos de una posible cuarentena. No se salvan de nada, al contrario, se arriesgan a terminar en el hospital y contagiar a las personas a su lado y que tengan una evolución mala. Dejemos de hacernos trampas al solitario”, reclamó García Comesaña, que calificó de “error mayúsculo” esta infradeclaración de contactos estrechos y recordó que solo se puede designar a una persona como contacto estrecho si lo señala como tal el caso primario.
Por su parte, la directora xeral de Saúde Pública, Carmen Durán, confirmó que la circulación de la variante alfa (británica) se cifra en el 28%, y la delta (india), en el 66%. Esta última variante, entre un 40% y un 60% más transmisible que la alfa, “se está incrementando a costa de la alfa, es el espejo de lo que está ocurriendo en el resto de España y de Europa”, explicó la doctora.
En cuanto a los infectados, Comesaña afirmó que solo el 5 por ciento había recibido la pauta completa de vacunación.
Dos fallecidos y descenso del ritmo de contagios
Galicia sumó ayer dos fallecidos con COVID-19, un hombre de 63 años que murió en el Chuvi –deceso fechado el martes– y otro varón de 84 años en el Hospital da Mariña de Burela. Ambos tenían patologías previas y con ellos el total de víctimas asciende a 2.455.
Los casos activos se sitúan ya en 18.535, pero los contagios descendieron a 1.257, esto es, 43 menos que la jornada anterior. El ritmo de ascenso de los contagios es ahora más lento, lo que parece confirmar las previsiones de la Xunta y de expertos independientes en torno a la llegada del pico de esta quinta ola en Galicia para la próxima semana.
En cuanto a la presión hospitalaria, se mantiene e incluso registran un ligero descenso: hay 234 hospitalizados en planta –dos menos– y la cifra de ingresados en uci permanece en 30.
La directora xeral de Saúde Pública, Carmen Durán, situó la tasa de positividad en el 12,3%, frente al 7,59% de la semana pasada.
Añadió que el número reproductivo instantáneo permanece por encima de 1 desde el 18 de junio, pero que desde el 15 de julio se empezó a constatar un ligero descenso en el ritmo de transmisión. De hecho, las áreas sanitarias de Ourense y Pontevedra están ya por debajo del 1 en este parámetro. “A partir del 15 de julio [el incremento de la transmisión] se produce de manera más lenta, a un 2,6%, parece que se está enlenteciendo relativamente el crecimiento”, destacó Durán.
Las residencias siguen registrando positivos. Ayer se sumaron 15 en la de Santo Estebo de Perlio, en Fene. El total de casos en estos centros de mayores y de discapacidad es de 32.
En cuanto a la vacunación con pauta completa, alcanza ya al 69,27 por ciento de la población diana, mientras que más del 77% de los gallegos a vacunar tienen al menos una dosis.
