La estación intermodal de Ourense suma otro nudo más en el capítulo final de su -presumible- ejecución. Un equipo de técnicos y la conselleira des Infraestructuras, Ethel Vázquez, se reunieron ayer con un grupo de representantes de la plataforma Tren Digno que reclama la modificación de la intermodal ourensana y en concreto, se sentaron en las oficinas santiaguesas, con la intención de que el gobierno gallego paralizase las obras por la situación futura del centro de salud, ubicado delante de la citada estación.
Tras diversas manifestaciones a pie de calle, el movimiento vecinal tuvo la oportunidad de explicar a al titular -y competente- de las obras de la estación de autobuses sus reclamaciones y su rechazo con el actual proyecto. En concreto, sobre la mesa, la reivindicación civil puso la posibilidad de paralizar las obras de forma "inmediata". Una petición que el gobierno gallego rechazó de forma tajante, ya que, según fuentes autonómicas, sería necesario comprometer una partida para pagar la responsibilidad civil a la actual empresa que está haciendo las obras y alargar los plazos de ejecución.
La reunión -poco fructífera- contó con la explicación técnica del equipo de la Consellería de Infraestructura sobre las "mejoras" que iba a prorcionar la actual estación de autobuses al barrio y al centro de salud. Una exposición que ya hizo la propia Consellería con Ethel Vázquez a la cabeza el pasado 27 de enero en la sede de la delegación provincial. Unos argumentos que no cambiaron la postura de la plataforma civil, que de forma decidida instaron a llevar la estación de autobuses más cerca de la calle Río Arnoia, en unos terrenos que son propiedad de Adif.
La negativa del gobierno gallego de paralizar las obras encendió la conversación y desde la plataforma propusieron una actuación que conllevaba bajar las vías del tren. Una competencia que es de Adif, y del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que todavía no se ha pronunciado a las solicitudes de la convocatoria de la Comisión de Seguimiento -estipulada en el convenio de 2016- que hicieron Xunta y Concello de Ourense.
Desde el área de Infraestructuras, advierten de la "politización de la plataforma" y no entienden que "vengan a la Xunta a pedir unas reivindicaciones que dependen de Adif y Fomento como son la parte ferroviaria". Por parte de la plataforma, no entienden el posicionamiento férreo del gobierno gallego del que intentaron "arrancar un pacto de ciudad" para una rectificación del proyecto de la estación de autobuses, valorando la negtiva como "perjudicial para los intereses presentes y futuros de Ourense". Describieron la actitud política como "propia de un gobierno poco sensible e incapaz de escuchar las demandas legítimas de la ciudadanía".
Sin un acuerdo y con el desacuerdo político en la Corporación de Ourense, todos los agentes implicados y los ourensanos miran al ministro José Luis Ábalos que se iba a reunir con los socialistas ourensanos, pero esa cita -de momento- no se produjo. La plataforma mantiene para el 18 de febrero, a las 20:00 horas, frente a la Casa de Chocolate la tercera convocatoria para demostrar que "Ourense está unido por una intermodal digna".
