Las aguas volvieron a su cauce en Lalín, de modo que en lugar de mantener el ambiente de entendimiento del pleno extraordinario del pasado día 11, la sesión de ayer volvió a caracterizarse por continuos cruces de acusaciones entre partidos, faltas de respeto entre ediles y revanchas arrastradas de plenos anteriores. Así que si el pasado mes la oposición plantó al gobierno porque quiso mudar el modelo de comparecencia en la intervención de Paz Pérez sobre el SAF, ayer el ejecutivo decidió que no debatiría las mociones que ya habían ido en el orden del día de noviembre, así que se limitó a dejar intervenir a la oposición y votó en contra.

Y, hablando de comparecencias, llegados al ecuador del pleno el alcalde, José Crespo, se preparaba para informar sobre la gestión de varias cuestiones (el anillo eléctrico, un quinto contenedor de residuos o internet de alta velocidad), cuando el portavoz del BNG, Francisco Vilariño, le instó a que aceptase su petición de comparecer en enero para abordar expedientes de obras paralizados desde el cambio de gobierno. Crespo lo vio como un chantaje, así que Vilariño se ausentó del pleno. Fue solo un par de minutos, después de que Crespo decidiese retirar su comparecencia. Eso sí, el PP votó en contra, ya hacia el final del cónclave, tanto en esa petición del Bloque como en la que planteó Compromiso para que Crespo explicase por qué el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, prometió una ambulancia medicalizada, cuando lo que hay ahora mismo "serviría para vendérsela al heladero", apostilló Rafael Cuíña. Por cierto, el Bloque volverá a llevar a pleno la moción que reclama dicha ambulancia, y lo hará acompañándola de las firmas que está recogiendo desde hace semanas. El gobierno no se pronunció sobre el tema de esta dotación, pero sí lo hizo sobre las obras para Maruja Gutiérrez, Monte Faro, Memorias dun Neno Labrego, Alcalde Ferreiro y Calzada. Crespo aseguró que se realizará el 100% de los trabajos que en su momento pactó con el cuatripartito, estando el PP en la oposición. Y añadió que, una vez que se licite el Centro Integral de Saúde, también habrá que hacer un proyecto de urbanización y licitarlo, tal y como ocurrió con la residencia de mayores del concello vecino de Silleda. "No estamos ralentizando esto, es que no dimos", recalcó.

Pero en casi seis horas de debate no todo iban a ser rifirrafes políticos y llamadas al orden. La corporación sí apoyó de forma unánime la moción del Bloque en la que propone iniciar una modificación del Plan de Urbanismo para que las nuevas plantas de tratamiento de residuos deban localizarse en suelo industrial especializado. Vilariño argumentó que esta medida "es la única herramienta real" para evitar la implantación de la planta de Racso. Medio Ambiente decretó la caducidad del expediente hace poco más de un año, pero podría reabrirse si la empresa reúne toda la documentación que se le pidió en su momento. Racso era, precisamente, otro de los temas que iba a abordar Crespo en su comparecencia, así que lo hará en una reunión de portavoces. El regidor apuntó que, aunque se modifique el PXOM, es posible que una sentencia judicial revoque un acuerdo plenario.

Aldea Grande

El PP incluyó en su campaña electoral la gratuidad del parking Aldea Grande. Así que ayer Compromiso por Lalín se lo recordó mediante una moción que instaba a tomar esta medida. Una opción que para los tres partidos va a convertir el aparcamiento en un cementerio de coches, después de un gasto de un millón de euros entre reparaciones y denuncias judiciales. La concejala socialista María Jesús Sánchez defendió el modelo actual, con tramos gratis en los horarios comerciales, y alertó del futuro laboral de las cuatro personas que trabajan en él si acaba siendo totalmente gratis. La oposición se abstuvo y el PP votó en contra. Paradojas.