Poco antes de las 21.30 horas de ayer José Manuel Cores Tourís se levantó del sillón de alcalde, y tras abrazarse a Luis Aragunde y saludar a todos sus compañeros del PP se sentó entre el público, junto a viejos compañeros de batalla municipal, como la ahora diputada Rosa Oubiña y José Antonio Domínguez. Mientras tanto, Aragunde ocupaba el sillón de Tourís y presidía por primera vez un pleno de Cambados, aunque por ahora sea en calidad de alcalde en funciones.

Tras la designación de Tourís como delegado territorial de la Xunta a media mañana, por la noche se cumplió al milímetro el guión previsto. Primero Anabel Carro renunció al puesto número 2 de la lista del PP, condición necesaria para que Aragunde pudiese acceder a la Alcaldía. Y después Tourís anunció su renuncia al cargo.

Una dimisión que, curiosamente, se produce justo once años después de que Santiago Tirado hiciese lo mismo en el pleno del 30 de abril de 1998 en el que Tourís se sentó por primera vez en el sillón de alcalde de Cambados.

Fue un pleno cargado de emotividad, y las más de veinte personas que acudieron en calidad de público –entre ellos el propio Santiago Tirado– prorrumpieron en un fuerte aplauso tanto cuando Tourís se levantó como cuando Aragunde pronunció sus primeras palabras como alcalde.

Tourís agradeció la colaboración de los vecinos para la ejecución de las obras, y los portavoces de la oposición le desearon muchos éxitos en su nueva etapa. Aragunde, por su parte –que será nombrado oficialmente alcalde en un plazo de entre 10 y 15 días– prometió mucho trabajo y tendió la mano a PSOE a BNG.

Las funciones de Tourís

A Tourís no le va a faltar trabajo. A partir de ahora va a asumir las funciones que durante la pasada legislatura hacían 13 delegados provinciales. Bien es cierto que su equipo de trabajo será más amplio que el que tenían bajo sus órdenes los anteriores delegados, pero eso no le evitará tener que estar muy pendiente de todo lo que suceda en la provincia, puesto que tendrá que gestionar asuntos muy diversos: desde el estado de mantenimiento de las escuelas o de los centros de salud, hasta la situación de las concentraciones parcelarias, pasando por las quejas vecinales por obras en carreteras o polígonos.

Además, Tourís tiene bajo su responsabilidad un número muy elevado de ayuntamientos. La delegación de Vigo tiene una demarcación de 14 ayuntamiento, y Cores Tourís, en cambio, se hace cargo de los 48 restantes, lo que significa el 78 por ciento del total de ayuntamientos de la provincia, que son 62.

Según el Decreto aprobado ayer por el Consello da Xunta, y que regula los ámbitos de competencia de cada delegación, Tourís debe estar pendiente de los asuntos tanto de los concellos situados más al norte, como Vila de Cruces o Agolada, como los que hacen frontera con Portugal, como A Guarda o Tui.

La marcha de Anabel Carro

Tras conocer la noticia, de su designación, Cores Tourís renunció a su escaño en el Senado –la plaza la ocupa desde ahora María Paz Lago, que es concejala del PP en Sanxenxo– e indicó que asume el cargo como "un nuevo reto y una nueva responsabilidad". También insiste en que visitará a todos los alcaldes "uno por uno para escuchar sus propuestas y apoyarlos en la medida de lo posible, sin tener en cuenta el partido al que pertenezcan".

El nuevo delegado territorial de la Xunta considera que "es mi deber ponerme a disposición de los alcaldes, representantes legales de sus vecinos, para normalizar las relaciones institucionales que quedaron bastante deterioradas en los cuatro años de gobierno bipartito".

Con él se lleva también a un puesto de gran responsabilidad dentro de la Delegación a Anabel Carro, que pese a todo seguirá siendo concejala durante un mes, para ultimar los detalles del Ano Cabanillas y de la próxima Festa do Albariño.

Además, el ya nuevo delegado territorial de la Xunta insiste en que en los próximos días le enviará una carta a los vecinos explicándoles los motivos de su marcha, tras once años en el gobierno local, pues en las pasadas elecciones municipales había prometido agotar en la Alcaldía los cuatro años del mandato.

Pillado, el alcalde que entró más joven en la corporación

José Manuel Cores Tourís nació en la parroquia de Oubiña el 1 de noviembre de 1958. Está casado y tiene dos hijas. Pertenece a Xóvenes Agricultores-Asaja Galicia, y en 1985 fundó Horsal junto con otros 14 labradores de O Salnés.

Fue el director gerente de esta cooperativa durante nueve años. También fue vicepresidente del Consello Regulador de la Denominación de Orixe Rías Baixas desde 1992, y fue miembro de las asociaciones española y europea de ciudades del vino (Acevín-Recevín) y de la española de ciudades de la pesca (Aecipe). También fue vocal del ente Portos de Galicia.

Su actividad política se inicia en 1987, al entrar como concejal de Cambados en el grupo de gobierno que entonces dirigía Antonio Pillado. Fue primer teniente de alcalde de 1989 a finales de abril de 1998, y en junio de ese mismo año sustituye en la Alcaldía a Santiago Tirado.

También fue presidente de la Mancomunidade do Salnés entre 1998 y 2003. Es senador desde 2000 por la provincia de Pontevedra, escaño al que también renunció ayer.

Su sucesor en la Alcaldía de Cambados es Luis Aragunde Aragunde. Es el segundo alcalde más precoz desde la democracia, porque tiene sólo 37 años. En 2001 entró en la corporación como concejal sustituyendo a Ramón Charlín. En las elecciones municipales de 2003 ascendió al número 3 de la lista del PP de Cambados y asumió las concejalías de Medio Ambiente y de Mar.

Es el jefe de la lonja en situación de excedencia desde 2007, cuando el PP revalidó su mayoría absoluta. En esas elecciones se convirtió en el "lugarteniente" de Tourís, tras la marcha de la política local activa de Rosa Oubiña y José Antonio Domínguez.

Hasta que asuma de modo oficial la Alcaldía de Cambados es el primer teniente de alcalde y el encargado de áreas como Personal, Servicios o Régimen Interior. Se va a convertir en el quinto alcalde de Cambados desde la vuelta de los concellos democráticos en 1979, tras el nacionalista Xoán Antonio Pillado Silvoso –que es quien asumió el bastón de mando a una edad más temprana, al hacerlo con 30 años–, Antonio Pillado, Santiago Tirado y Tourís.