La renovación de la iluminación pública llega al centro histórico y zona norte de la ciudad

Se sustituyen 1.600 luminarias, 170 columnas y una treintena de cuadros de mando en otras tantas vías | En el rural queda por renovar una parte de Lérez, Salcedo y Tomeza

El alcalde observa las nuevas farolas apiladas en los jardines de Marescot.

El alcalde observa las nuevas farolas apiladas en los jardines de Marescot.

Con una inversión de casi 9 millones de euros, el Concello de Pontevedra avanza en la renovación de toda la iluminación pública de la ciudad y de las parroquias del rural, que ahora llega a la zona centro y norte del ámbito urbano. Se trata de una actuación realizada con la empresa local Setga y que visitó el alcalde de la ciudad, Miguel Anxo Fernández Lores, quien destacó que esta inversión “va a significar una mejora en la calidad de la iluminación y un ahorro energético de un 70 o 80 por ciento” respecto al actual.

La intervención supone un cambio y una mejora de las luminarias actuales en todo el centro y zona norte de la ciudad, lo que implica sustituir 1.600 luminarias, 170 columnas (unas aprovechables y otras que se cambian), así como una treintena de cuadros de mando en otras tantas calles y plazas, que se renovarán por completo por unos nuevos, para evitar al máximo que haya pérdidas de energía.

La obra que visitó el alcalde forma parte de un proyecto de cambio a luces a LED en todo el ámbito urbano y el rural. En las parroquias solo queda por renovar una parte de Lérez, Salcedo y Tomeza, mientras que en el resto están ya cambiadas.

En las parroquias, los últimos contratos formalizados por el Concello se extendían a cinco de ellas. El primer proyecto, adjudicado por 1,2 millones de euros, se centró en Mourente y Marcón, y el segundo, de similar importe, se ejecutó en Verducido, Santa María de Xeve y Santo André de Xeve. Ambos contratos fueron ampliados por las dificultades de la concesionaria, la empresa Setga, para conseguir microchips debido al impacto de la pandemia en China, que afectó al ritmo de uno de sus principales puertos, el de Shangai, a mediados del año 2022. La implantación de la tecnología LED en las parroquias permitirá ahorrar hasta 370.000 euros a las arcas municipales, según datos del Concello. En el ámbito urbano solo falta la renovación de la parte centro y norte de la ciudad incluido el centro histórico.

El plan se integra además en un programa más amplio de mantenimiento del espacio público en general, con el cuidado de ese espacio público, retirada de elementos que ya no son servibles y la mejora de la iluminación. Son criterios recogido en los presupuestos y “en los que ya estuvimos actuando durante todo el verano, retirando cabinas de teléfono, repasando las aceras, retirando vallas del espacio público, o haciendo limpiezas en determinados barrios”, como recordó el alcalde.

“No solo hay que hacer obras de nueva planta, sino también mantener lo que se ha hecho y eso requiere un esfuerzo y es valorado por la ciudadanía”, añadió Lores.

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