La ciudad perdió 1.700 alumnos en cinco años pese al crecimiento de la FP, que llega a 3.300

La caída de la natalidad repercute en el censo educativo, con 23.500 estudiantes en todos los niveles, un 7% menos que en 2018 | Hay colegios donde la matrícula cayó a la mitad

Una actividad en el instituto de FP Carlos Oroza de formación en cocina y hostelería.

Una actividad en el instituto de FP Carlos Oroza de formación en cocina y hostelería. / Gustavo Santos

El censo oficial de la educación en Pontevedra, al cierre del último curso cerrado, el de 2022-2023, fue de 23.459 estudiantes. Son casi 1.600 alumnos menos que hace cinco años. En 2018 se superaban los 25.000 usuarios en todos los niveles, desde la educación primaria hasta la universitaria y tanto en la oferta pública como la privada.

Los datos del Observatorio Urbano de Pontevedra, elaborado en el campus local, revela que en este lustro se ha producido un retroceso del 7% en el número de estudiantes en la ciudad, en especial en los denominados regímenes general (Primaria, ESO y Bachillerato) y especial (idiomas o conservatorio, por ejemplo). Su descenso no es compensado por el aumento de la Formación Profesional, que suma ya 3.257 estudiantes, un 4% más que en 2018, con una amplia oferta de más de sesenta ciclos formativos en una decena de centros.

Al margen de otras causas, la principal razón de esta caída general hay que buscarla en el descenso de la natalidad en los últimos años en la ciudad y en el resto de la comarca, ya que una parte importante del alumnado, sobre todo en Bachillerato, PF y el campus procede de otros municipios. Así, en Educación Infantil el desplome de la matrícula en estos cinco años ronda el 18% y apenas son 13.700 niños, frente a los casi 14.600 de 2018. En Educación Primaria, la caída es menor pero significativa, más de un 9%, con 500 jóvenes menos. En cambio, la ESO y en Bachillerato aún resisten con 5.980 estudiantes, ochenta más que hace un lustro.

Este fenómeno de pérdida de alumnado se verifica de forma más clara en un análisis centro por centro. De la treintena de colegios públicos y privados que imparten todos o parte de los cursos de educación general, solo cuatro presentan ahora una matrícula más alta que hace cinco años. Dos son públicos (el colegio Parada en la parroquia de Campañó y el Froebel, en el casco urbano), y los otros dos son privados: Los Sauces, curiosamente también ubicado en Campañó, y el Sagrado Corazón de Jesús, en la ciudad. En todos los demás casos se registran pérdidas paulatinas de alumnos, con casos extremos de alguno que tienen la mitad de estudiantes que en 2018. Además, desde hace varios cursos han desaparecido escuelas rurales ante la escasa matrícula. El Observatorio Urbano cita la EEI de Verducido como la única en funcionamiento, con una decena de niños.

En el régimen especial, que agrupa por ejemplo a la Escuela de Idiomas, el Conservatorio de Música y la Escuela de Restauración, hay algo más de tres mil estudiantes, novecientos menos que hace cinco años. Solo el centro de Restauración está en mejor situación, con 99 usuarios, frente a los 88 de 2018, si bien en el curso 2021-2022 tenía 102. En este capítulo también se incluyen centros privados de música o educación deportiva que se imparte en el IES Sánchez Cantón.

Según el informe elaborado por el campus, la Escuela de Idiomas suma algo más de dos mil alumnos que reciben clases de seis lenguas, mientras que en el Conservatorio Manuel Quiroga se imparte formación en más de una veintena de instrumentos, con una matrícula de algo más de 600 estudiantes, si bien se aclara que una persona puede estar matriculada en más de una especialidad a la vez.

Una alta demanda en ciclos sociosanitarios y administrativos

Según los datos del Observatorio Urbano, en el curso 2022-2023 la Formación Profesional ofrecía unos sesenta ciclos, tanto de Formación Básica como de los grados medio y superior en una decena de centros. Entre las especialidades con mayor número de alumnos destacan las relacionadas con la actividad sociosanitaria y la administración, si bien la lista la encabeza la de educación infantil, con 2221 matriculados. Así, la de atención a personas en situación de dependencia contaba con 252 estudiantes, mientras que otros 250 cursaban Gestión Administrativa. Había 135 en Administración y Finanzas y otras 112 en Laboratorio clínico y biomédico. Hay 149 en Cuidados auxiliares de enfermería. También presentan un alto grado de inscripciones en ciclos como Cocina y gastronomía (82), Instalaciones eléctricas y automáticas (71), Electromecánica de vehículos automóviles (82), Animación sociocultural y turística (71), o Automoción (74). Lourizán, A Xunqueira, Carlos Oroza, A Xunqueira I, Martín Sarmiento, Torrente Ballester, Luis Seoane, Montecelo y Sánchez Cantón acogen algún ciclo.

El quinto campus gallego por número de estudiantes

El campus de Pontevedra cerró, el pasado verano, el curso 2022-2023 con 3.420 estudiantes en su decena de titulaciones, lo que lo sitúa como el quinto de Galicia en este apartado, solo por delante de Ferrol (2.103), de la Universidade de Santiago, y Lugo, de la de A Coruña (3.173). El más numeroso es el de Santiago, con más de 17.000 alumnos, seguido del de A Coruña, con 11.423, y el de Vigo, con 8.326. En Ourense había 4.036 matriculados. La titulación con más alumnos es la de Educación Infantil y Primaria, con 720 estudiantes, por delante de los 508 de Belas Artes o los 504 de Ciencias da Actividade Física e do Deporte. En Publicidade e Relacións Públicas eran 438, mientras que el grado de Ingeniería Mecánica que se imparte e los alumnos de la Escuela Naval contaba con 351 alumnos. En cuando a los másters, había 440 matriculados y se registraron 257 graduados y el pasado curso finalizaron titulados un total de 656 estudiantes, un centenar de ellos en Belas Artes y casi 150 en Educación Infantil y Primaria. Donde menos hubo fue en Xestión Pública (18) y Forestais (23).

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