El alcalde de Portas intenta evitar la huelga de hambre de un vecino por temas burocráticos

El alcalde de Portas, Ricardo Martínez, mantuvo una reunión ayer con Fernando Martínez Piñeiro, un vecino de Parada que estaba dispuesto a iniciar una huelga de hambre ante el Concello, con el fin de escuchar sus argumentos y, desde el diálogo, intentar adoptar una solución a su situación, “siempre desde el respeto a la ley y a la normativa, que es igual para todo el mundo y hay que cumplirla”, indicó el regidor.

Fruto de ese diálogo y de la buena disposición por parte del Concello, Ricardo Martínez y Fernando Martínez quedaron emplazados para este jueves, 18 de mayo, con la intención de analizar con la arquitecta municipal el expediente que obra en el Concello sobre su vivienda y las obras allí realizadas con el fin de poder subsanar, por su parte, cualquier irregularidad que pueda acogerse a la normativa vigente.

Ricardo Martínez reiteró la voluntad dialogante del Concello de Portas con este y con cualquiera vecino y le trasladó a Fernando Martínez su máxima disposición para resolver cualquier problema que se pueda plantear, pero siempre desde la legalidad y el respeto sin ceder a presiones externas que se puedan adoptar, ya que “tenemos que aplicar la ley y la normativa a todo el mundo por igual y no hay excepciones porque se adopten medidas unilaterales que en nada ayudan a resolver el problema”.

El alcalde reclamó a los funcionarios los expedientes relacionados con la vivienda de Parada con la intención de que en la reunión del jueves se puedan analizar, entre la técnica municipal y el vecino, todas las circunstancias que concurren en este tema con el fin de que se ponga sobre la mesa toda la información y la situación en la que se encuentra la tramitación de estos expedientes.

Fernando Martínez, de 58 años, estaba dispuesto a comenzar ayer una huelga de hambre ante el Concello de Portas por la demora en la concesión de una licencia para una vivienda que quiere destinar al alquiler turístico. Concretamente, para conseguir la licencia de la Xunta de Galicia necesita un certificado del Concello de Portas acreditando que no tiene abierto ningún expediente urbanístico. Según explicaba hace unos días, se encuentra en una situación límite, de ahí que optara por llevar a cabo esta medida de presión a pesar de ser diabético, lo que podría resultar peligroso para su integridad física.