La demanda de terrenos industriales en A Reigosa: 14 parcelas en nueve años

Solo dos empresas presentan ofertas en el último concurso de Xestur en este polígono

Polígono de A Reigosa.

Polígono de A Reigosa. / Rafa Vázquez

Hace unas semanas, el alcalde de Pontevedra, Miguel Fernández Lores, reclamaba a la Xunta que activara la ampliación del polígono empresarial de O Campiño con el fin de disponer de suelo para la implantación de futuras iniciativas. La respuesta autonómica fue inmediata: no hay demanda suficiente para afrontar esa ampliación, y más teniendo en cuenta que en el vecino parque de A Reigosa (ubicado en Ponte Caldelas pero unido al de O Campiño) aún existen 112.000 metros cuadrados disponibles, más los 41.000 de la Central de Transportes, vacía desde su apertura.

Esta postura de la Xunta acaba de ser ratificada por el PP en el Parlamento gallego, a raíz de una iniciativa de la socialista pontevedresa Paloma Castro para que se reconsidere esa negativa de ampliación y no solo incluya a O Campiño, sino que se extienda al de A Reigosa. Además, se pide reactivar el de Fragamoreira, en Poio y se apueste por un puerto seco en Leborei (Cerponzóns).

Los datos aportados por la parlamentaria del PP María Begoña Freire en la comisión de Industria del pasado viernes parecen confirmar que la oferta real de suelo empresarial en los últimos años no justificaría ese tipo de ampliaciones. Así, según sus explicaciones, entre 2015 y 2022 (ocho años) las empresas solo han adjudicado doce parcelas en A Reigosa, que suman 67.400 metros cuadrados. Y el concurso convocado por Xestur (la empresa pública que gestiona este polígono) en febrero pasado para vender un total de 112.000 metros cuadrados de suelo aún disponible solo suscitó el interés de dos compañías, que piden un total de 14.500 metros cuadrados. De adjudicarse estas dos solicitudes, aún quedarían disponibles en el parque de Ponte Caldelas unos 98.000 metros cuadrados.

De este modo, la demanda real de los últimos nueve años está clara: catorce parcelas, con el agravante de que nueve de ellas se adjudicaron entre 2015 y 2017, cuando se iniciaron los descuentos del 30% en el precio del metro cuadrado. En 2018 no se vendió ningún solar, al igual que en 2022, mientras que entre 2019 y 2021 hubo una adjudicación cada año.

En su respuesta parlamentaria, Begoña Vázquez, recordó que en la provincia “está en tramitación la ampliación del parque empresarial de Bueu por parte de la iniciativa privada y también hay suelo disponible en el parque de Nantes, en Sanxenxo”. También aludió a los anuncios realizados por Zona Franca para “apoyar al Concello de Caldas para el desarrollo del polígono de Carracedo con un millón de metros cuadrados” o el convenio con Cuntis para actuar en A Ran, así como el apoyo al de Fragamoreira en Poio.

Aunque el PP expresa sus dudas de que estos proyectos salgan adelante, sostiene que aún hay suelo disponible suficiente para descartar posibles ampliaciones a corto o medio plazo.

Fondos europeos para crear un puerto seco

La parlamentaria socialista Paloma Castro, que defendió en la cámara gallega la ampliación de los parques de la comarca, insistió en una vieja demanda del Puerto de Marín: disponer de un puerto seco para desahogar la falta de espacio del recinto marinense. Aunque se discrepa sobre su ubicación, todos coinciden en su necesidad. El PSOE, al igual que el Concello de Pontevedra, apuestan por Leborei, en Cerponzóns, una opción que la Autoridad Portuaria no apoya. Castro sostiene que en ese ámbito se podrían habilitar 435.000 metros cuadrados “para permitir ampliar la industria vinculada al Puerto, con espacio suficiente y conectividad necesaria” y emplaza a la Xunta a “aprovechar la oportunidad de los fondos europeos” para afrontar su ejecución.

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