El sector marisquero de la ría comienza la semana con la buena noticia de que la mayor parte de sus bancos vuelven a estar abiertos, salvo los más próximos a Pontevedra, ya que la denominada Zona V, en la desembocadura del Lérez, continuaba ayer cerrada por toxina. El Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño (Intecmar) decretó el pasado sábado el levantamiento del cierre cautelar en la zona IV, aguas afuera de la Illa de Tambo y de la clausura de la III, situada a continuación hacia el mar. En la tarde de ayer aún estaba sin autorización la desembocadura del río, donde se concentra buena parte de los bancos donde trabajan los mariscadores de Poio y Pontevedra. No obstante, el hecho de que ya haya desaparecido la toxina de la práctica totalidad de la ría (aunque no para las bateas) salvo en la zona final, lleva a las cofradías a albergar esperanzas de que a partir del próximo lunes, día 18, cuando podrían regresar a las playas, lo puedan hacer con normalidad.

El trabajo permanece paralizada casi desde comenzó el mes salvo alguna jornada al principio, y a lo largo de la semana que hoy comienza no hay permisos de extracción, pero sí a partir del día 18. De estar entonces abiertos todos los bancos, el sector aún podría salvar en parte la campaña de este mes.