Miguel Fernández Lores lamentó que "no podemos resolver los 7 años perdidos" en el proyecto de Gran Montecelo "pero no hay que malgastar ni un minuto más sino trabajar rápido" para intentar paliar los déficits en la atención sanitaria del área norte.

Incidió en que el Concello cumplirá puntualmente sus compromisos "para posibilitar una instalación sanitaria pública, con futuro y dimensionada". De hecho, el convenio que suscribirá la administración local con la Xunta establece claramente que todos los servicios e infraestructuras (accesos, abastecimiento de agua, luz, gas, alumbrado, telefonía, saneamiento etc) han de estar ejecutados "con anterioridad a la finalización de la ampliación del Hospital con el objeto de garantizar su puesta en funcionamiento".

A propósito del riesgo de que el convenio con la Xunta sea un nuevo anuncio electoral y si se descarta definitivamente construir Monte Carrasco, el alcalde respondió que se trata de una obviedad, dado que todo el proyecto "fue un bluf... Sería la tercera vez que se rompe un convenio. No es posible ni viable ni nada pase lo que pase en el futuro, éste es un convenio que no tiene vuelta atrás". Un nuevo descarte de la Xunta sería, en opinión de Fernández Lores, "una vergüenza".

Insistió en que el Concello siempre ha defendido que la ampliación de Montecelo es una intervención "más barata y razonable" que Monte Carrasco, cuyo carácter público siempre estuvo en duda y que el gobierno local nunca consideró una posibilidad real.