La concejal de Termalismo reconoce que pese a la presión social por volver a contar con uno de los centros más atractivos de la oferta termal de la ciudad, "no podemos dar plazos de inicio de las obras; es un proceso complejo y aunque hay buena voluntad por parte de las instituciones, los permisos de la Confederación son fundamentales, y tenemos que dar cumplimiento a todos los requerimientos que nos van solicitando". Así que toca esperar.