La ambiciosa reforma integral del Concello Vello de Moaña deberá estar lista en dos semanas, tras la segunda ampliación del plazo de ejecución. Ayer los vecinos que circularon por la céntrica calle Ramón Cabanillas se vieron sorprendidos por el revestimiento blanco de gran parte de la fachada, que ya está lista para la instalación del prometido y vistoso jardín vertical que será una de las señas de identidad de este edificio en su nueva vida.
En los próximos días los operarios deberán cubrir las dos fachadas laterales de cemento con unas 2.000 plantas, que cubrirán un total de 68 metros cuadrados. Se respetará, eso sí, la fachada central de piedra, que es la parte más antigua del inmueble y data de los años 20 del pasado siglo.
El objetivo de la fachada vegetal es, además de embellecer el inmueble, generar oxígeno y atrapar polvo y elementos contaminantes. Las plantas elegidas para el jardín vertical son agapantos (Agapanthus africanus), begonias, la trepadora Ficus pumila; la Gazania rigens con flor anaranjada; el romero o Rosmarinus officianalis; la hierba rastrera Soleirolia soleirolii, con color verde brillante; la Salvia microphylla, que es un arbusto perenne procedente de Arizona, con flores rojas; la Dichondra agentea o oreja de ratón, que es una trepadora verde que se extiende formando tapiz; o la Convolvulus cneorum, con flor blanca.
El reformado Concello Vello acogerá unas renovadas instalaciones para Protección Civil, salas de reuniones, zonas de estudio y un local de ensayos para grupos musicales de la localidad que incluye una sala de grabación.
