Bea Sotelo convierte el salón de plenos de Bueu en una cocina para reivindicar a las cocineras

Trece locales de Bueu participan desde ayer en unas jornadas gastronómicas muy especiales. Unas jornadas en femenino y con tapas inspiradas en la cocina de Bea Sotelo, una de las cocineras gallegas más reconocidas y con una estrella Michelin. Antes de encenderse los fogones se organizó un reconocimiento en el salón de plenos del Concello de Bueu, un espacio que durante unos momentos se convirtió en una cocina.

El reconocimiento a Bea Sotelo es una iniciativa conjunta del Concello de Bueu, la asociación de hosteleros y Fecimo, que de esta manera quieren poner en valor la aportación de las mujeres en la restauración y la alta cocina. “En el caso de las mujeres parece que la cocina es algo innato, casi obligatorio: la comida en casa, en el trabajo. A veces dar ese paso de darte a conocer no es fácil porque tienes otras muchas responsabilidades, pero hay que hacerlo, hay que darse a valer”, defendía ayer.

El Concello de Bueu le realizó un primer homenaje en 2018, cuando la invitó a ser la pregonera de la Festa do Polbo. No fue un pregón al uso, sino que lo convirtió en una demostración práctica de cocina. Algo parecido hizo ayer en el salón de plenos, en el que preparó una tapa de jurel marinado, con encurtidos, hortalizas y una salsa con reducción de soja con picante. Un plato que completó con una ración de postre que consistía en un bizcocho de almendras, crema de mantequilla, mandarina, puré de frutos secos y un cremoso de aceite de oliva.

Todo ello aderezado con una gran sonrisa y una más que evidente felicidad. “En la hostelería somos muy generosos porque repartimos felicidad entre la gente y por eso tengo esta cara de alegría”, contaba al final del homenaje-degustación, en el que los representantes de la corporación de Bueu le entregaron una cerámica de Sargadelos con la imagen de Rosalía de Castro.

La cocinera acudió acompañada de su familia y aprovechó para recordar sus orígenes en Bueu, de donde es natural su padre. Tuvo palabras especiales para Florentina “Tina” Pérez Estévez, la que fuera dueña y cocinera del restaurante A Centoleira. “Cuando empecé a estudiar cocina en el centro Carlos Oroza de Pontevedra el primer verano que trabajé fue en A Centoleira. Tina era una mujer con una gran mano para la cocina y con un corazón enorme. Todavía la recuerdo cantando mientras preparaba el marisco y conservo la libreta con recetas que escribí durante aquellos meses con ella”, explicaba Sotelo.

Al homenaje acudieron gran parte de los establecimientos que participan en estas jornadas, que junto al Concello de Bueu reivindicaron el papel de las mujeres en la cocina. Las mujeres representan más del 80% del personal en las cocinas y aunque parece que son los hombres “los que marcan los goles” en la alta cocina, en realidad nada sería posible sin el trabajo de las mujeres. “Ellas consiguieron mantener la tradición gastronómica hasta la actualidad y este reconocimiento es un acto de justicia”, defendía Antonio Rosales, en nombre del gremio hostelero de Bueu.

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