Justifica que tenía más de medio kilo de cannabis para “pasar el confinamiento”

La Fiscalía mantuvo su petición de condena de cinco años de cárcel y cuatro años y seis meses de prisión para los ocupantes de un vehículo que fue interceptado en la AP-9 a su paso por Vilaboa (Pontevedra) con 688 gramos de resina de cannabis.

Según han explicado los agentes de la Guardia Civil durante la vista oral, el día 20 de mayo de 2020, en un control de seguridad habilitado en la autopista AP-9 a la altura del peaje de Vilaboa, dieron el alto a un vehículo Ford Escort “ante la actitud de nerviosismo” de sus dos ocupantes, descubriendo la droga.

Durante la vista, uno de los acusados ha reconocido los hechos y ha exculpado al conductor, su cuñado. Éste último aseguró que se llevó “una sorpresa” al descubrir la droga. “No sabía lo que había en el bolso” y dice que se puso nervioso al ver a los agentes de la Guardia Civil porque es gitano.

Dependencia crónica

El otro acusado, por su parte, declaró que la droga era para consumo propio. “Cogí para dos meses porque estaba confinado”, ha dicho, en referencia a la pandemia de COVID-19. El abogado aportó un informe que acredita que su cliente presentaba alteración en su capacidad volitiva por su dependencia crónica a sustancias de abuso. “Hace tiempo consumía habitualmente cocaína y heroína y ahora estoy un poco mejor y solo fumo porros habitualmente. No puedo estar sin fumar, no soy persona”, aseguró.

El Fiscal considera que los acusados portaban las mencionada sustancias con la intención de comercializarlas de forma ilícita y que habrían alcanzado en el mercado negro el valor de 3.092 euros. Lo s agente de la Guardia Civl que participaron en el control apuntaron que el conductor “dijo que no sabía nada de la droga antes de que encontrasen las sustancias estupefaciente en el vehículo.

La vista se celebró ayer en la Sección Segunda de la Audiencia de Pontevedra.