Augas renueva los manantiales de Domaio por 20 años y la restricción duró hasta noviembre

Las 500 viviendas de la traída comunal de Palmás-Costa tuvieron más de 5 meses de límite de agua por culpa de la sequía | La Xunta les da permiso para aprovechar 89.000 metros cúbicos al año

El depósito de aguas de la traída comunal de Palmás. |  GONZALO NÚÑEZ

El depósito de aguas de la traída comunal de Palmás. | GONZALO NÚÑEZ / Fran G. Sas

La Comunidade de Usuarios del agua de Palmás-Costa, en Domaio, acaba de lograr la renovación, por parte de Augas de Galicia, de la concesión para seguir abasteciéndose de más de una decena de manantiales y tres pozos. Es una de las traídas comunales de Domaio y Meira, una estrategia típicamente moañesa en la comarca para abastecer de agua a los vecinos al margen de la red general. La de Palmás-Costa cuenta con más de 500 viviendas usuarias y la autorización de Costas les permite abastecerse con un total de 89.048 metros cúbicos anuales de agua. Sus manantiales proceden de los lugares de Pombal, Carballido, A Costa y Palmás.

Esta traída, que tiene su depósito principal en la entrada a la Autovía do Morrazo por San Lourenzo, funciona con las mencionadas captaciones desde hace décadas y este año, al igual que el resto de comunidades de este tipo en Moaña, sufrió los rigores de una primavera y un verano extremadamente secos y calurosos.

Hasta el punto de que los responsables de la comunidad de aguas hablan de unas restricciones de récord. Comenzaron el 1 de junio y no se le puso fin hasta el pasado 5 de noviembre. “Las lluvias de octubre no habían sido suficientes y el agua tardó en filtrarse en una tierra seca hasta volver a brotar en los manantiales”, argumentan.

Cuando, a comienzos del mes pasado, se puso fin a las restricciones, los límites estaban en solo 500 litros de consumo por vivienda, lo que dificultaba mucho las tareas diarias a las familias con más miembros.

El tope estaba, al final del verano, a 500 litros por día para cada casa

Las restricciones el 1 de junio habían comenzado con un tope de 1.000 litros por día. Después bajaron a 800 y al final del verano ya estaba en los 500 litros como máximo. “En otros años llegamos, en un mes central del verano, a límites de solo 300 litros. Pero nunca estuvimos tantos meses con restricciones”, apuntan desde este colectivo.

Hay que recordar que algunas traídas de Meira habían comenzado a limitar el consumo incluso en le mes de mayo, lo que implicó casi medio año de sequía.

Canalizaciones

Ahora, ya con las captaciones a rebosar de agua, la traída de Palmás-Costa aprovechará el arreglo de dos caminos por parte del Concello para desviar bajo ellos las canalizaciones, retirándolas del subsuelo de las fincas particulares.

Suscríbete para seguir leyendo