La Mostra de Cangas ha permitido acercar al público a reconocidos actores. Este es el caso de Gabino Diego. El actor actuó ayer como artista invitado en la obra "El desguace de las Musas" de la compañía teatral La Zaranda y dedicó el día a disfrutar de la gastronomía, comiendo en Bueu, y del paisaje de O Morrazo. Sobre el escenario del Auditorio representó a Melvin Kentucky, un personaje, como él señala, "que viene a renovar el teatro de cabaret, el cual está dirigido por un señor llamado Don Pepe".
-Continuando con la obra de ayer "¿Cuáles fueron sus puntos más destacados?"
-La obra, para quién no conoce el mundo de La Zaranda, uno de los grupos más importantes de este país, se presenta como una oportunidad para poder visualizar un espectáculo original y con un trabajo actoral muy potente.
-La Mostra, en la cual se enmarca la obra, se celebra en Cangas. ¿Ha sido su primera vez en este municipio?
-No, ya estuve anteriormente actuando con el espectáculo Una noche con Gabino.
-¿Qué es lo que más te gusta de esta zona de las Rías Biaxas?
-Bueno eso es una preguntamuy difícil de explicar. Aparte de la belleza de la zona o la gastronomía, me gusta mucho la gente. Me siento muy a gusto en Cangas. Cuando me dijeron que veníamos con el espectáculo fue una ilusión muy grande.
-Durante su estancia, ¿Qué actividades desarrolló en el municipio?
- Lo típico, disfrutar de la belleza y gastronomía de la zona. Yo interpreté a dos personajes de Vigo, y estar aquí me recuerda esos momentos sobre un escenario.
-En relación a su carrera profesional, ¿tiene algún proyecto en mente?
-Ahora mismo estoy con la función El desguace de las musas, con la cual viajaremos en agosto a Brasil o Méjico. Además existen otros muchos proyectos más adelante que aún no están confirmados.
-Para finalizar, esta semana falleció el actor Arturo Fernández con el que compartió escena en la película Desde que amanece apetece . ¿Cómo definiría a este icono del audiovisual español?
- Yo trabajé con él y siempre admiraré mucho su pasión por el teatro. Murió encima de un escenario, haciendo teatro, que era lo que más le gustaba. Todas las escuelas de arte dramático deberían de haber llevado a los alumnos a ver a Artuto Fernández porque era un señor que con la edad que tenía era increíble verlo sobre un escenario.
