Las respectivas federaciones provinciales de cofradías están dando los primeros pasos para fijar su postura de cara a la negociación del nuevo plan de explotación del pulpo. Uno de los asuntos más espinosos es la veda en la extracción, que suele ser de entre mes y medio y dos meses. La Federación de Pontevedra ha remitido una circular a los pósitos de la provincia para que celebren asambleas con el sector y conocer su opinión. Este mismo viernes está prevista una reunión en Arcade para, en función de la postura adoptada por cada pósito, elaborar una propuesta definitiva. A continuación debería celebrarse un encuentro entre las federaciones provinciales de Pontevedra, A Coruña y Lugo para buscar una posición de consenso y remitir una sola proposición a la Consellería do Mar, que es quien tiene la última palabra. En caso de que no exista acuerdo cada federación enviará su propuesta y después decidirá la consellería.
El plan de explotación del cefalópodo incluye más aspectos, como el régimen de calado de las nasas, los horarios de trabajo... pero lo que más urge definir ahora es el periodo de veda. "Hay que acordarlo cuanto antes porque debería empezar en mayo. El resto de las cosas se pueden negociar durante el tiempo de veda", explican desde Pontevedra.
El año pasado la veda del pulpo comenzó en el 16 de mayo y la actividad se retomó el 1 de julio, al mismo tiempo que volvía al mar el arte de la nasa de la nécora.
