España tramita evitar la salida de la flota de Bissau tras un nuevo acuerdo con la UE

Alcanzan un nuevo pacto de pesca por 17 millones de euros

El actual protocolo expira el 14 de junio y Pesca busca una prórroga antes de que entre en vigor el nuevo

El negociador comunitario Emmanuel Berck y el ministro guineano Mario Musante da Silva tras el acuerdo

El negociador comunitario Emmanuel Berck y el ministro guineano Mario Musante da Silva tras el acuerdo / Cedida

Adrián Amoedo

Adrián Amoedo

Las negociaciones entre la Unión Europea y Guinea Bissau para alcanzar un nuevo acuerdo de pesca fueron muy rápidas. La buena disposición de ambas partes y la cercanía del final del pacto, el próximo 14 de junio, aceleraron las conversaciones entre ambas partes hasta que este jueves sellaron el acuerdo. La contrapartida económica crece, pasando de los 15,6 a 17 millones de euros, y las posibilidades de pesca se mantienen inalteradas para los casi 35 buques españoles que lo utilizan, entre ellos los buques excefalopoderos gallegos que ahora capturan principalmente especies demersales. Sin embargo, los procesos de ratificación por los que ahora tiene que pasar el nuevo protocolo obligarán a una salida de la flota del caladero desde el 15 de junio, algo que España está intentando evitar con el apoyo de Italia, Francia y Portugal.

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, celebró ayer la finalización “con éxito” de las negociaciones entre las dos partes, ya que, como recordó, es “estratégico para la flota española que faena en estas aguas”. En la escueta nota en la que comunicó la buena noticia, el Gobierno añadió que “España ha solicitado a la Comisión Europea que habilite un mecanismo que permita la continuidad de la actividad pesquera hasta la finalización de los trámites administrativos preceptivos para su puesta en marcha definitiva”. Es decir, una prórroga del acuerdo todavía vigente hasta que entre en vigor el nuevo.

El objetivo que se fija Pesca es que el Consejo defienda esa prolongación, por lo que en una carta suscrita por Italia, Francia, Portugal y España han insistido en ese mecanismo de prórroga. El principal problema al que se enfrentan para hacer efectiva la medida es la cercanía de las elecciones europeas, ya que además aumentaría con toda probabilidad los plazos de ratificación, lo que afectaría todavía más a la flota.

Fernando Rebollo (Anamar), Henrique Silva (el jefe de delegación de Guinea Bissau del Protocolo 2019-2024) y Francisco Fernandez (Anacef)

Fernando Rebollo (Anamar), Henrique Silva (el jefe de delegación de Guinea Bissau del Protocolo 2019-2024) y Francisco Fernandez (Anacef) / Cedida

Acuerdo

El nuevo protocolo, que tendrá una duración de 5 años, es similar al anterior y mantiene las posibilidades de pesca para la flota gallega y para el resto de buques españoles, que incluye a 12 arrastreros marisqueros, 14 buques atuneros cerqueros y palangreros de superficie españoles que tienen licencia para el caladero guineano y a tres atuneros cañeros.

Una de las reclamaciones más importantes de los barcos gallegos era que se mantuviera el sistema de TRB, toneladas de registro bruto, que permite la entrada de flota hasta alcanzar un límite fijado. El de la categoría 1, de peces y cefalópodos, se mantiene en 2.900 toneladas para España y otras 600 para otros países como Italia y Grecia. Esto se mantendrá al menos los dos primeros años, aunque el sector cree que se mantendrá para los otros tres años de vigencia.

Menos positivas so otras cláusulas del acuerdo, en especial el incremento del canon a pagar por los armadores, que crece un 10%, hasta los 310 euros por TRB. De igual forma, también se aumentó el número de tripulantes locales que tendrán que llevar los barcos comunitarios, en función de su tonelaje, con una persona más y hasta un máximo de 8. Además, el pago por los observadores científicos a bordo, obligatorios, pasa de 8.000 euros al año a los 10.000.

Junto a ello, la parte africana incluyó una cláusula por la que establecerán una tasa sobre el valor de la licencia y, a petición del sector, esta será la misma para los 5 años que dure el acuerdo, sin posibilidad de que se incremente unilateralmente. También se incluyó otra por la que el salario de los tripulantes guineanos no puede ser inferior a la del convenio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para la pesca.

Las negociaciones se cerraron tras dos meses y medio de reuniones y concluyeron en la tercera ronda en el país africano. Las dos rondas anteriores tuvieron lugar en Lisboa (entre el 24 y el 26 de abril) y en Bruselas (4 y 5 de abril).

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