Las pesqueras gallegas pagan los segundos sueldos más altos de la economía argentina

Mar del Plata, Puerto Deseado, Caleta Paula, Comodoro Rivadavia, Puerto Madryn, San Antonio Este... La actividad extractiva, industrial y logística de las pesqueras de capital gallego se extiende a lo largo de toda la geografía costera de Argentina, punto neurálgico para el sector exterior de la comunidad a nivel mundial. Se trata de un sector capital para la economía del país sudamericano, exportador neto –existen campañas que intentan promover el consumo, con poco éxito– y, por tanto, generador de codiciadas divisas.

Un nuevo estudio elaborado por la Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de la Argentina (Capeca) ha vuelto a poner en valor, además, el grado en que la pesca redunda en el mercado laboral local. Solo la extracción de petróleo abona salarios más elevados que compañías como las filiales o participadas de Iberconsa, Nueva Pescanova, Profand, Vieirasa o Fandicosta, como ha constatado el investigador Fabián Pettigrew. En suma, son 644 las empresas que conforman esta industria en Argentina, entre flota pesquera, procesadora, acuicultura, de servicios de apoyo a la pesca, de elaborados o para aceites y harinas con base de proteína marina.

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La remuneración fluctúa de forma notoria entre las distintas provincias debido a la temporalidad. “En Buenos Aires existe una baja estacionalidad en la flota fresquera porque las capturas por especies son más diversas”, constata Pettigrew. El protagonismo de este tipo de buques, cuyas capturas son procesadas en tierra, ha ido en aumento. El valor de este producto es mayor, y deja una mayor rentabilidad a la economía del país.

Armadoras como Iberconsa, con los barcos Coraje, Siempre Santa Rosa o Golfo San Matías, han ido incorporando fresqueros a su flota en los últimos años. La estacionalidad es mucho mayor en las provincias de Chubut y Santa Cruz, donde están el grueso de las operaciones de Vieirasa o Nueva Pescanova, circunstancia que este estudio vincula a una mayor dependencia de las campañas de langostino y pota.

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Los pagos

En total, las actividades derivadas de la pesca generaron retribuciones por más de 62.000 millones de pesos, que al tipo actual de cambio supera los 300 millones de euros durante el ejercicio 2021. Aunque el petróleo es el sector que abona en general los salarios más altos, en la provincia de Chubut la pesca escala al primer puesto durante los meses de verano, precisamente por el peso que tienen los recursos estacionales (gambón y pota). En esta provincia –con puertos emblemáticos como el de Puerto Madryn (muelle Storni) o Comodoro–, el salario de un marinero embarcado en un buque congelador supera los 263.000 pesos argentinos, equivalente a día de hoy a 1.307 euros mensuales.

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En las factorías de procesado, por ejemplo, las nóminas rondan los 826 euros al mes. En Santa Cruz las remuneraciones escalan mucho más, hasta los 1.800 euros para el personal embarcado y por encima de los 1.300 euros para el personal de las fábricas de elaborados, de acuerdo a este mismo estudio. En la provincia de Buenos Aires es la actividad vinculada a los aceites y harinas de pescado en la que más se gana, con sueldos que, de media, rondan los 1.125 euros por persona al mes.

La gran losa para los trabajadores, también para los adscritos a la pesca, es la inflación que asola al país americano. De acuerdo a la información oficial divulgada por el Banco Central de la República Argentina, diciembre cerró con un avance mensual en los precios por encima de los cinco puntos; la inflación interanual acarició el 95%.

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