Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El alcalde activa la cuenta atrás para encender los 11 millones de luces LED

“Será la mejor Navidad del planeta”, avanza | Recuerda que la reducción del horario del alumbrado supondrá un ahorro de energía superior al 14%

Caballero y Rivas, ante el marcador de la cuenta atrás, en la Farola. P.H.

Empezó la cuenta atrás para el encendido de las luces de Navidad de Vigo. El alcalde, Abel Caballero, acompañado por el concejal Ángel Rivas y la lluvia, pulsó el botón para activar el marcador electrónico que restará segundo a segundo el tiempo que falta para ver brillar los 11 millones de luces LED repartidas por la ciudad: llegará ese momento el sábado 19 de noviembre, paso que convertirá a la ciudad olívica en la primera del país en iluminarse. Se ve en una gran pantalla colocada por primera vez junto a la Farola de Urzaiz, a unos pasos del acceso peatonal al parquin subterráneo. En ocasiones anteriores, lució pegada a la fachada del MARCO.

En palabras del regidor, es la cuenta atrás para el inicio de la “Navidad más importante del planeta”. Marca los días, las horas, los minutos y los segundos para el sábado 19 de noviembre, día del “gran encendido de la Navidad de Vigo o, lo que es lo mismo, el encendido de la Navidad en todo el mundo”. “Los millones de luces LED, 4.000 arcos de luz, árboles con luces frías para iluminarlos sin dañarlos, fachadas, mercadillo, noria gigante, pistas de hielo, rampas de nieve, trenes turísticos y un larguísimo etcétera de cuestiones que van a adornar y amenizar la ciudad y hacer que la Navidad de Vigo siga siendo la mejor del planeta. Y todo esto, con un importante ahorro de energía que supera el 14%. Es la Navidad más importante de este planeta”, anotó en los momentos previo a la activación de la cuenta atrás en el marcador.

El ahorro de energía es clave este año. Lo es todavía más que en otras ediciones en una coyuntura marcada por la invasión de Ucrania por parte de Rusia. De ahí el interés del alcalde en dejar claro que el ahorro rebasará el 14%. Lo conseguirá reduciendo las horas de funcionamiento del alumbrado. Según afirmó Caballero en el acto de inicio de la instalación de las luces, a principios del pasado mes de agosto, y repitió en varias ocasiones, Vigo cumplirá con los requerimientos de Madrid y Bruselas con creces, puesto que el mínimo que se exige es del 7%. En lugar de iluminarse los adornos navideños a las 18.00 horas y apagarse a la 1.00, estarán brillando de 18.30 a 00.30 horas de domingo a miércoles y festivos víspera de laboral. El horario de encendido será el mismo de jueves a sábado y vísperas de festivo, así como en las jornadas fuertes –23, 24, 25, 30 y 31 de diciembre y 1, 5 y 6 de enero–, pero el de apagado se establece a las 2.00 horas, es decir, no estarán prendidos casi toda la noche como ocurrió hasta ahora.

Una receta similar aplicarán otros Ayuntamientos de España, como Málaga, Ciudad Real o Bilbao, que retrasa una semana el encendido de las luces de Navidad –el 30 de noviembre– además de acortar una hora al día los fines de semana el encendido. Barcelona, por ejemplo, mantendrá las luces brillando desde el 24 de noviembre hasta el 6 de enero y las apagará una hora antes: de 17.30 a 22.00 horas de domingo a jueves y de 17.30 a 23.00 los viernes y sábados. Madrid representa el otro lado de la moneda: no alterará horarios.

Los dirigentes coinciden en señalar que las luces de Navidad son una apuesta segura para fomentar la actividad en los comercios locales, un beneficio que hace imposible pensar en minimizar en exceso su instalación u obviarla en tiempos de crisis por la situación bélica en Ucrania y las heridas de la pandemia.

El BNG aprovechó la activación de la cuenta atrás para manifestar la necesidad de que el Concello “ponga en marcha un plan de choque contra la pobreza energética”. “La cuenta atrás que verdaderamente les importa a las familias trabajadoras de la ciudad son los días que faltan hasta la próxima factura de la luz”, apuntó el portavoz de la formación en el Concello, Xabier P. Igrexas.

Compartir el artículo

stats