Tras la relajación de las medidas contra el COVID-19, Portugal se ha reactivado en el mapa como destino para los gallegos. El aumento del precio del combustible y el elevado coste de los peajes han provocado que muchos se hayan planteado viajar a Oporto en tren. Para ellos, la decisión será quizás más fácil tras la última promoción de Renfe y Comboios de Portugal, que rebajan a 5,25 euros el billete desde Vigo -también desde Santiago- hasta la ciudad lusa a través del Tren Celta.
Las dos compañías ferroviarias ibéricas han lanzado una promoción conjunta para los cuatro servicios que ofertan, dos de ida y dos de vuelta, que permanecerá activa hasta el 30 de junio para un total de 15.000 asientos. La oferta comenzó hace unas semanas, pero todavía restan plazas a bajo coste, también para Semana Santa. Así, el trayecto desde Vigo a la segunda ciudad más poblada de Portugal podría realizarse por 5,25 euros en lugar de los 14,95 habituales. En el caso de Santiago de Compostela -con enlace en Vigo-, pasa a ser de 10,30 € cuando de forma rutinaria se eleva a 11,50 (convoy de media distancia) o 9,55 (convoy regional) solo desde la capital gallega a la urbe olívica.
Para validar la rebaja -similar a la que se activó del 17 de octubre al 11 de diciembre del pasado año-, la compra de los billetes debe efectuarse únicamente a través de la página web de Renfe. En los próximos días, el primer pasaje rebajado se puede encontrar el domingo a las 8.58 h, el viaje matutino, no así para el segundo y vespertino, que es a las 19.56 h y ya cuesta nueve euros más. Además, todavía hay oportunidades para algunos huecos en Semana Santa y, sin ir más lejos, para el siguiente fin de semana.
CONEXIONES
• Vigo-Oporto: salida a las 8.58 (hora española) desde la estación de Vigo-Guixar y llegada a Campanhã a las 10.20 (hora portuguesa); y partida de Vigo-Guixar a las 19.56 (hora española) con arribada a Campanhã a las 21.18 (hora portuguesa).
• Oporto-Vigo: salida de Campanhã a las 8.13 (hora portuguesa) y llegada a Vigo-Guixar a las 11.35 (hora española); y partida de Campanhã a las 19.10 (hora portuguesa) con arribada a Vigo-Guixar a las 22.34 (hora española).
¿Tren, coche o bus para viajar a Oporto?
La opción del convoy está siendo cada vez más sopesada por los gallegos a raíz del fuerte aumento del precio de los combustibles en las últimas semanas y el elevado coste de los peajes. La cara B de este medio de transporte es la duración del trayecto, de 2 horas y 22 minutos como mínimo, y su antigüedad. Los trenes destinados a esta ruta gallegoportuguesa son unos diésel de los años 80 propiedad de Comboios, pero alquilados por Renfe, que a lo largo de los últimos años se han averiado en varias ocasiones.
Por otro lado, a su favor juegan las vistas que proporciona el viaje, que permite otear desde el puente internacional de Tui, obra del afamado ingeniero francés Gustave Eiffel, hasta varias rutas de senderismo, pasando por los ríos Miño y Limia o por las espectaculares playas que bañan la costa portuguesa. Campanhã, la estación de llegada, tampoco se puede pasar por alto; no tiene el reconocimiento de São Bento, pero sí desprende un encanto propio.
Viajar en automóvil
Elegir el coche para cruzar la frontera, ahora más que nunca, podría ser motivo de reflexión, si bien reduce en cuarenta minutos el tiempo de arribada: 1 hora y 45 min. aproximadamente. Y es que, a pesar de las bonificaciones estrenadas hoy, que rebajan en al menos 20 céntimos el litro de combustible, el precio tanto del diésel como de la gasolina está en niveles estratosféricos.
Otro gasto extra para llegar a Oporto a través de carretera si se elige la autopista son los dos peajes existentes: el de Porriño, que se eleva a 2,90 euros, y el de Maia, ya en el país luso, de 8,90 euros.
El siguiente quebradero de cabeza una vez cruzado el confín es dónde aparcar en la metrópolis tripeira y, sobre todo, tener en cuenta el peligro de dejar el coche en plena calle, con el riesgo de que aparezca con los cristales rotos y desvalijado por dentro, un contratiempo que ya le ha amargado el viaje a más de uno. Por ello, la mejor elección en el caso es usar uno de los párquines privados situados en los alrededores de la ciudad; hay incluso hoteles y 'guest houses' que cuentan con descuentos especiales para que sus clientes puedan estacionar en estos cobijos.
Viajar en bus
El itinerario en bus está a medio camino entre el tren y el coche. La duración del periplo es de 2 horas y 10 minutos en Alsa y de 2 h y 15 min. en Flixbus. Ambas ofrecen varias líneas a lo largo de cada jornada. En el caso de la primera compañía, esta también proporciona actualmente un descuento en sus tiques: el precio actual es de 12 euros. Para la segunda, los pasajes se ponen a disposición desde los 5 euros hasta los 20, dependiendo del día y la hora.
En lo referente al control fronterizo, según explica el Ministerio de Exteriores de España en su web, "no existen restricciones y no se exige certificación sanitaria alguna"
¿Hay alguna restricción COVID-19 en Portugal?
Portugal se mantiene en situación de alerta -hasta el 18 de abril- debido a la pandemia de COVID-19, pero la situación es, al igual que en el resto de territorios europeos, más laxa en cuanto a las restricciones de lo que lo fue durante los pasados meses. En la actualidad, el país luso tan solo exige el certificado de vacunación -o bien el de recuperación o un test negativo- para visitar a pacientes ingresados en centros sanitarios o a usuarios de centros de mayores -quedan eximidos los menores de 12 años-.
En cuanto a la mascarilla, esta es únicamente obligatoria en interiores, y los contactos de positivos en SARS-CoV-2 no tienen por qué guardar cuarentena.
Finalmente, en lo referente al control fronterizo, según explica el Ministerio de Exteriores de España en su web, "no existen restricciones y no se exige certificación sanitaria alguna".
