Como reza el refrán, la música se convirtió ayer en el lenguaje universal de todos los vigueses. Y es que la Orquesta Clásica de Vigo ha querido conmemorar el Día Europeo de la Música con hasta ocho conciertos en varios puntos y plazas del Casco Vello con la colaboración de la Escola Municipal de Música y el Orfeón Mariñeiro do Berbés.
Las actuaciones comenzaron a primera hora de la tarde en la plaza Tenente Almeida con el repertorio de un cuarteto de cuerda de la Escola Municipal de Música de Vigo. Numeroso público se congregó desde las 17.00 horas en los puntos de encuentro para no perderse ningún acorde clásico de los virtuosos de la música.
Tan solo 45 minutos después, esta misma plaza se celebró un segundo concierto de la mano de otros jóvenes de la Escuela así como un tercero, a las 20.15 horas.
La Travesía de la Esperanza también afinó su particular banda sonora y en ella actuó otro quinteto de jóvenes promesas y una solista.
En la calle Méndez Nuñez también se reunió un nutrido grupo de amantes de la música para escuchar el recital de otros profesionales como son Pedro Fernández, Lucía Molina, Nuria Buceta, Iria Pérez, Emma Alonso, Alba Martínez y Óscar Expósito. Los encargados de cerrar la programación fueron el Orfeón Mariñeiro do Berbés y la Orquesta Clásica de Vigo en la Praza da Igrexa que actuaron a las 20.30 y 21.00 horas, respectivamente, poniendo el fin de fiesta más musical posible.
La Orquesta Clásica optó por esta lúdica forma de celebrar el Día Mundial de la Música porque "no sabemos vivir sin música, por eso lo demostramos llenando de ritmo y melodías las plazas del Casco Vello durante una tarde".
