El campo gallego se blinda con seguros que superan los 930 millones de valor

Un sector cada vez más profesionalizado y campañas institucionales y subvenciones para incentivarlo, detrás de esta evolución que ha crecido un 34% desde el año 2017

Vacas de una explotación paciendo en un día soleado.

Vacas de una explotación paciendo en un día soleado. / Bernabé/Javier Lalín

X. A. Taboada

X. A. Taboada

Hasta no hace mucho, los profesionales de la agricultura en Galicia eran muy reacios a asegurar su producción o su ganadería ante un riesgo imprevisto. En el conjunto de España, la comunidad aún se mueve en la parte baja de la tabla con respecto a otros territorios, pero desde hace unos pocos años, los gallegos también se han subido al carro de las pólizas y en 2022 se ha llegado a una cifra de récord en capital asegurado. Se alcanzaron los 930 millones de euros, 62 más que el año anterior (868), lo que muestra además un incremento por encima del 34% con respecto a 2017.

El motivo de esta evolución responde básicamente a que el sector gana en profesionalización y las explotaciones aumentan de tamaño y, por tanto, también el volumen de su producción, a lo que se suman las campañas institucionales de concienciación y las subvenciones tanto por parte del Ministerio de Agricultura como de la Xunta para animar a los agricultores a contratar un seguro y tratar de vencer su tradicional reserva para dar este paso.

En el año 2022 se firmaron en Galicia 42.974 pólizas, que representan el 10,5% del total de España (409.087). Con respecto a 2021, se ha producido un ligero descenso, ya que en ese ejercicio se contrataron 44.369. Esto se debería a un fenómeno de concentración en el campo gallego, que es lo que está pasando, precisamente, con el sector lácteo, que asiste a una reconversión, de forma que se reduce el número de explotaciones, pero básicamente de las más pequeñas, mientras se incrementan las de mayor dimensión y aumentan la producción total de leche en Galicia y la rentabilidad por granja, además del número de animales por explotación.

Solo hay dos comunidades con mayor número de pólizas: Castilla y León, con 75.064, y Castilla-La Mancha, con 48.327. El resto está por debajo, pero en cambio su capital asegurado es bastante más elevado, lo que responde a un fenómeno mucho mayor de concentración de las explotaciones frente a una Galicia donde el minifundismo aún es claramente dominante en la estructura agraria productiva.

El capital asegurado en España asciende a 16.329 millones de euros, de los que 930 (el 5,6%) corresponde a Galicia. Muy por encima se encuentran Andalucía (2.584 millones), Castilla y León (2.467), Castilla-La Mancha (2.026), Cataluña (1.399) o Aragón (1.344).

En una comparación histórica, según un informe de la Consellería do Medio Rural, el capital asegurado en Galicia entre los años 2017 y 2022 creció un 34%, arrancando en algo más de 700 millones para acabar en los 930.

En este mismo plazo, los animales asegurados pasaron de 26,28 millones a 37,48 –un 42,6% de incremento–, con las vacas como principal activo, pero también hay cerdos, ovejas y conejos. Básicamente se asegura la vida del ganado, así como su retirada en caso de muerte y destrucción.

Y la superficie amparada pasó de 14.200 a 22.512 hectáreas, lo que supone un incremento del 58,5% con respecto al año 2017.

Los gallegos pagaron por sus primas 39,9 millones de euros y los siniestros notificados apenas supusieron un retorno de seis millones en concepto de indemnizaciones. 

Para animar a los agricultores y ganaderos a contratar seguros, entre el Ministerio de Agricultura y la Consellería do Medio Rural subvencionan la mitad de la prima. El Gobierno central aportó en 2022 10,5 millones de euros en ayudas mientras que la Xunta contribuyó con 7. Para la campaña de este año, Medio Rural destinará 8,5 millones.

¿Cuál sería el objetivo ideal de capital asegurado? La Xunta no se pone una meta, pero indica que cuanto más, mejor, pues el seguro evita que la viabilidad económica de una explotación se vea comprometida por riesgos imprevistos en el ganado o en la cosecha.

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