Los alumnos de FP modular, obligados a terminar a distancia sus grados a mitad de titulación

La Xunta cambia “por sorpresa” y unilateralmente el modelo | “Hablan de multiplicar plazas, pero sin calidad”, dicen los docentes

Alumnos, en una clase de su ciclo de mecánica naval.

Alumnos, en una clase de su ciclo de mecánica naval. / José Lores

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Un correo electrónico con la decisión tomada es lo que recibieron los equipos directivos de los institutos de Galicia que imparten grados de Formación Profesional (FP) modular. El modelo, pensado para que personas con poca disponibilidad horaria (como los adultos trabajadores o con hijos) puedan seguir formándose de manera presencial, fue “anulado de golpe y por sorpresa”, según indican los docentes del IES de Chapela (uno de los centros afectados) y sostienen que se trata de un “trabajo hecho” sobre el que “poco se puede hacer más que denunciarlo”. 

Profesores de distintos centros educativos de Pontevedra señalan la posibilidad de que la Xunta utilice este cambio para promocionarse políticamente. “Al pasarlo a la modalidad a distancia se multiplican las plazas de cada módulo, porque los alumnos accederán a una plataforma online con los contenidos del grado volcados. Así, el mismo número de profesores atiende las dudas del triple de alumnos. Eso quiere decir que se dispara la oferta a costa de la calidad en la enseñanza”, sostienen los profesores consultados. El CIFP A Xunqueira, es uno de los más afectados al perder un ciclo de FP Básica, cambiar a la modalidad a distancia dos superiores y perder 4 docentes. “Eliminar la presencia en las aulas implica que alumnado desde los 15 años en adelante, se vea obligado a estudiar en centros privados o a distancia”, sostienen desde el instituto pontevedrés. 

Los docentes también señalan lo que significa este cambio tan drástico para los centros sin haberlo consensuado. “No nos dejan alternativa, solo nos han facilitado una dirección electrónica para que comuniquemos si existe alguna razón de causa mayor para incumplir los deseos de la Consellería”. Sostienen que se trata de una falacia, ya que la “la Xunta sabe perfectamente el equipo personal y tecnológico con el que cuenta cada centro porque los suministra la propia Administración”. Asimismo, el profesorado se muestra preocupado por el giro que esta decisión supone en el terreno de la educación pública. “Es eliminar la oportunidad de estudiar en las mejores condiciones a personas que quieren mejorar sus vidas y, por tanto, la de la sociedad en su conjunto, ya que se trata de formación especializada de profesionales que se necesitan”, explican. 

La medida, ha caído como un plomo sobre los equipos de los cerca de 15 institutos públicos que tienen en la actualidad oferta formativa modular activa. “Cómo vamos a explicarle a una persona que ha hecho encaje de bolillos con su vida, su trabajo y su familia, para poder asistir a clases presenciales este primer curso, que el que viene tendrá que hacerlo solo, desde su casa por vía telemática”, se preguntan los profesores. “Hay grados que requieren clases presenciales por su complejidad o el tipo de contenidos, como el grado superior de Dietética, el de Educación Infantil o los sociosanitarios. Con esta decisión, el peso de la educación recae sobre el alumno casi en su totalidad y hablamos de educación pública”, sentencian. 

La Confederación Intersindical Galega (CIG) Ensino ha pedido la dimisión de la directora xeral de FP por “despotismo y planificar la desaparición paulatina” de estos ciclos en lugar de promocionarlos. Apela a la dirección de los institutos a elevar una queja ante Inspección Educativa. Y convoca una concentración a las puertas de cada centro el viernes a las 11.30 horas.