Rueda “vende” en México el avance en renovables para captar inversiones

Galicia lanzó ayer un gancho comercial en México basado en el impulso a las energías renovables, clave en el futuro, y una ubicación estratégica como puerta de entrada al mercado europeo y de enlace con África. Fueron dos de los elementos con los que el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, trató de captar la atención de los empresarios mexicanos e incentivar sus negocios con la comunidad.

El dirigente gallego expuso su interés en fomentar los lazos económicos entre Galicia y el país americano durante un encuentro con inversores mexicanos celebrada en Ciudad de México, última parada de su viaje por América, que comenzó el jueves pasado.

El país presidido por Andrés Manuel López Obrador constituye un territorio fundamental para la economía gallega, pues lidera tanto las importaciones como las exportaciones fuera de la Unión Europea. En el encuentro celebrado ayer, Rueda quiso destacar la vanguardia de las energías renovables para captar el interés del capital mexicano, pero también “la estabilidad política, la solvencia financiera y la situación geográfica estratégica de Galicia” no solo como puerta de entrada al mercado de la UE, sino también como enlace con África.

La sostenibilidad y la soberanía energética resultan elementos determinantes para los países desarrollados y una oportunidad de negocio e innovación. Galicia, expuso Rueda, se encuentra a la vanguardia en ese terreno. “A día de hoy, casi el 80% de la electricidad que se consume en Galicia proviene de renovables, tanto hidráulica como eólica”, destacó ante empresarios mexicanos y españoles en la capital azteca. En ese punto, recordó la existencia de proyectos para aprovechar el potencial del viento en el mar y la importancia que su administración concede a la colaboración público-privada, como muestra, dijo, el impulso a la futura planta de fibras textiles a partir de restos de madera o la fábrica de hidrógeno verde.

Además, también destacó el intento de su administración por fomentar el regreso de los emigrantes y sus descendientes a la comunidad. Su meta es conseguir el regreso de 30.000 personas en tres años, de las que 18.000 tengan menos de 45 años.

Antes de ese encuentro, Rueda participó en la Fiesta de la Ramallosa del Centro Gallego de México en la propia capital del país, antes del cual reconoció que la comunidad gallega se encuentra “en deuda” con la emigración y su contribución “al progreso” de la sociedad.

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