“Cuanto más sabes, menos te la cuelan”

El jueves 14 de marzo, el Museo MARCO se convirtió en el centro neurálgico de operaciones contra la desinformación en internet. Los cuerpos especiales de CPR El Pilar - Maristas, CPR Apóstol Soutomaior, CPR Possumus, Colegio Lar y CPI Cova Terreña se dividieron en las dos sesiones de Cazabulos, el espectáculo de Ciencia y Humor, pionero programa educativo con el que el CSIC y Big Van Ciencia buscan enseñar a los jóvenes a detectar ‘bulos’ científicos en redes sociales.

Oriol Marimon y Elena González fueron los maestros de ceremonias de este show para estudiantes de secundaria que arrancaron con música y aplausos, porque la ciencia también puede ser divertida.

La ola de desinformación de internet

“En las redes sociales no se controla ni revisa lo que se sube” explica Oriol Marimon, centrándose especialmente en la información científica.”En temas de STEM vale todo, se sube cualquier cosa y muchos mensajes falsos se amplifican, generando la aparición y el refuerzo de pseudociencias y teorías conspiranoicas que pueden ser peligrosas para la salud pública”.

Y aunque seamos nativos digitales, nadie se salva de que “se la cuelen”, por eso se hace más necesario que nunca tener unos trucos “bajo la manga” como los que repartió Elena González durante su intervención.

300 estudiantes vigueses, a punto de convertirse 
en “Cazabulos” científicos

“Mirad este vídeo” señalaba a la pantalla que se encontraba a su espalda. “Ha generado mucha controversia en internet: y es que científicos chinos han conseguido clonar dragones”. El público contuvo la respiración durante unos segundos, hasta que la bióloga congeló el clip y afirmó: “Esto es completamente falso, ¿pero cómo lo sabemos? Nuestra principal arma es el conocimiento: si sabemos lo suficiente de ciencia sabremos que los dragones no existen, porque no hay ningún vertebrado con seis extremidades, ni ningún animal que tenga a la vez alas y brazos. Pero si queremos ir más allá: fijaos en las manos de los científicos del vídeo ¡tienen seis dedos!”

Los usuarios, en general, estamos “flojos de herramientas” explica Marimon “Y los jóvenes más, pues tienen menos experiencias y aterrizan en un mundo -el de internet- muy amplio, donde hay gente muy potente creando unos contenidos muy bien creados con la intención de engañar. De esa falta de herramientas es de donde nace Cazabulos, con la intención de que tengan algo a lo que agarrarse a la hora de ver un vídeo: algo que les haga reaccionar y comprobar por sí mismos si esa información es veraz o no.”

“Para poder diferenciar verdad y mentira es importante estar formados”

“A veces los datos pueden usarse a favor del bulo, pueden estar recortados, ensombreados…” explicaba Elena González, mostrando gráficas que sí, apoyan “medias verdades” difundidas en internet, pero que son rebatibles cuando nos informamos lo suficiente y aprendemos a leer estadísticas, mapas y a ver el plano completo de los datos de los que disponemos.

Así, continuaron mostrando a los estudiantes del público una serie de vídeos virales falsos y sus contrapuntos desde cuentas científicas fiables: el bulo de las vacunas que imantan a quien se las pone, las influencers generadas por inteligencia artificial... E incluso desmontaron los remedios “naturales” de la homeopatía.

El concurso Cazabulos

Pero el evento solo es la puerta de entrada para la siguiente fase de Cazabulos, una en la que los estudiantes son los protagonistas. “Ahora es vuestro turno para desmontar bulos: tenéis que enviarnos un vídeo en formato tiktok utilizando las herramientas que os hemos dado hoy: fuentes fiables, formación, datos reales... ¡Los finalistas llegarán a la Gala Final!” Se puede participar hasta el 30 de abril y los ganadores podrán visitar una instalación científica singular del CSIC.

Así que, infórmate y ¡que no te la cuelen!

“Combatir la desinformación es como intentar vaciar el océano con un cubo”

“Las redes sociales han afectado de lleno al tráfico de información y a la rapidez en la que los jóvenes se involucran con los contenidos: la apariencia de veracidad es el mayor peligro” explica Pura Fernández, Vicepresidenta Adjunta de Cultura Científica y Ciencia Ciudadana del CSIC.

Así nace Cazabulos, con la idea de que esos jóvenes puedan chequear la información, encontrar fuentes fiables para contrastar las noticias y puedan consultar recursos de la mano de influencers científicos de calidad. 

“Más del 20% de lo que está circulando por redes sociales no solo carece de validez científica, sino que es flagrantemente falso. Por likes, por dinero, por interés. Combatir la desinformación es como intentar vaciar el océano con un cubo, por eso la clave es facilitar instrumentos para generar una capacidad de análisis entre los jóvenes.”

Esos recursos se encuentran en la web del CSIC, junto a las reglas del Concurso, para que desde el momento en el que agarramos un teléfono móvil podamos estar seguros de lo que consumimos: “No se trata de generar una culpa individual (pues puede llevarnos al negacionismo) sino de explicar la verdad en todos los lenguajes”.