El Corredor Atlántico Ferroviario de la UE, irrenunciable

Este pasado 17 de noviembre, al mediodía, comenzaba en el Centro de Convenciones Internacional de Barcelona el 6º Acto Empresarial por el Corredor Mediterráneo, como siempre, bajo su lema #QuieroCorredor. Mientras ellos aglutinan esfuerzos por concluir un trazado casi completado, el Noroeste peninsular espera por una red ferroviaria y unas infraestructuras propias del siglo XXI.

En un agravio comparativo sin precedentes, año tras año el Ejecutivo Central destina partidas mil millonarias al Levante, mientras relega y pospone la ejecución de los más elementales estudios que permitan iniciar, de una vez por todas, la vertebración del Noroeste Peninsular.

El Corredor Mediterráneo funciona, y dispone desde 2018 de un comisionado, Josep Vicent Boira, encargado de forma expresa de su desarrollo. El Corredor Atlántico aún espera que la promesa de contar con su propio comisionado tenga nombre y apellidos.

Ninguna razón es válida para priorizar uno sobre otro. Como empresarios somos conscientes de que todas las oportunidades de progreso deben ser bienvenidas y respaldadas de forma unitaria. Para nosotros, la existencia del Corredor Mediterráneo y el respaldo en bloque que recibe por parte de los empresarios de las comunidades autónomas por las que transcurre -muchos de ellos de una envergadura empresarial incuestionable-, no sólo es un ejemplo a imitar, sino es un punto de partida para reclamar al Gobierno Central que dote al Corredor Atlántico ferroviario de mercancías de la UE de los mismos recursos financieros.

Entendemos que el Mediterráneo era más fácil de lograr, simplemente, por la orografía. Pero, no nos engañemos, nuestra condición periférica debe ser un aliciente más para, precisamente, actuar más unidos que nunca, para vertebrar, unificar e impulsar todo el Noroeste Peninsular, que tantas características comunes tiene, tanta necesidad de dotar a este territorio de unas infraestructuras y vías de comunicación acordes con su dinamismo socio-empresarial, para darle el empuje definitivo.

Nuestro tejido empresarial se lo merece, tiene méritos para competir en igualdad de condiciones. Y para ello, sumamos otras demandas: la Salida Sur, tanto de alta velocidad como de mercancías, que el Gobierno luso apoya sin fisuras, lanzando órdagos antes de cada Cumbre Ibérica para finalizarlo en el menor tiempo posible; la Intermodalidad, con la interconexión de los puertos generales del Estado con la Plisan; e incluso, que el ferrocarril comience a jugar un papel determinante en el desarrollo industrial del sector del automóvil en la provincia de Pontevedra, con un enlace a la terminal Ro-Ro de Bouzas.

En los últimos dos años los hechos nos han demostrado la relevancia de la logística como uno de los factores más importantes de la actividad empresarial. No sólo por su coste, sino por lo que aporta en términos de competitividad. Unas vías de comunicación fluidas, intermodales, modernas, aportan un plus a cualquier tejido empresarial, a cualquier ecosistema económico.

La provincia de Pontevedra, con esta Confederación y su Consejo Asesor al frente, hace ya muchos años que alzó la voz, junto con otras organizaciones empresariales, no sólo de Galicia, Asturias y Castilla y León, sino incluso de la Eurorregión Galicia-Norte de Portugal -socias en muchos casos en proyectos europeos comunes- para alertar de que el Noroeste quedaba fuera del Corredor Atlántico. Conseguimos su inclusión, pero apenas hemos avanzado.

#QueremosCorredor, #QueremosFuturo

Las desigualdades son evidentes. Es cierto que, a veces, enriquecen. Pero otras, resultan un agravio comparativo. Y precisamente, desde la Confederación Empresarial de Pontevedra insistiremos en que nosotros, también #QueremosCorredor, pero el nuestro. El que contribuya a nuestro desarrollo y garantice el futuro de esta amplia área geográfica con tantos retos comunes: el de la fuga del talento, el de la despoblación, el del envejecimento poblacional, el de la crisis de natalidad, el de la España Vaciada… 

#QueremosCorredor porque #QueremosFuturo y lucharemos por darle a las generaciones venideras las mejores opciones y condiciones posibles para continuar apostando por este territorio con un empresariado tan pujante, tan dinámico y tan luchador como ha demostrado ser.

Cada una de las provincias de este Noroeste periférico -que agrupa las de A Coruña, Lugo, Ourense, Pontevedra, Asturias, León, Zamora y Salamanca-, tiene estadística e individualmente, un peso relativo que podría ser calificado de poco significativo. Pero las ocho juntas representamos el 10% de la población de España. Además, producimos el 9% del PIB nacional y el tejido empresarial del Noroeste Ibérico conformamos el 10% de las empresas nacionales, generando hasta el 9,6% de los puestos de trabajo de todo el país. Nuestra importancia, en bloque, sumada a las estadísticas del Norte de Portugal, son apabullantes. Pocas regiones de la Unión Europea concentran tanto potencial.

Desde una perspectiva puramente empresarial, nuestro punto de vista es que, a mayor dinamismo empresarial, mayor número de empresas, generación de más empleo, crecerá la recaudación de impuestos, habrá más riqueza circulante, más progreso y mayor bienestar para toda la población de la Eurorregión. Y que si a Galicia y a las CCAA colindantes les va bien, al Norte de Portugal le irá bien, y viceversa. Desde hace más de 25 años, este es el origen del compromiso de la CEP con la Cooperación Transfronteriza. Y éste, es irrenunciable.