“Vamos a llegar a 1.200 MW en la cartera de proyectos participados en 2027”

Después de levantar una planta de gas en la esquina del país y convertir a Reganosa en un operador internacional, Emilio Bruquetas está acostumbrado a los retos en el siempre delicado mercado de la energía. “Es cierto que es un sector con muchísimos actores, pero venimos a jugar un rol importante, a colaborar también con esos actores y asegurar que los beneficios de todos estos proyectos repercutan de una manera tangible en el territorio”, asegura el consejero delegado de Recursos de Galicia, la promotora impulsada por la Xunta y una treintena de las grandes empresas de la comunidad para dar un giro de 180 grados en el aprovechamiento del potencial renovable. “Un proyecto con una visión global en todo el territorio y para todos los recursos”, dice, que aspira a repetir con las fuentes limpias la revolución económica que en su día supuso el carbón.

–Habla de “colaborar” y el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, presentó la sociedad como “referencia y guía” para los agentes sociales y las propias empresas energéticas. ¿En qué sentido?

–Podemos fijar estándares que otros sigan, aunque no colaboren con nosotros, porque nuestros estándares de repercusión en el territorio serán muy altos y muy sofisticados. Vamos a elaborar estrategias de repercusión distintas por tecnología. Está en nuestro objeto social. La compañía nace para eso y otros tendrán que imitar esos estándares.

–Cuando uno ve la campaña de presentación de Recursos de Galicia y, entre otras cosas, la mención expresa al himno gallego, es difícil no pensar en cierto nacionalismo económico.

–No se trata de nacionalismo. Lo único que dice y hace la campaña es poner en valor ese objeto social. El propio nombre lo dice también: “os nosos recursos ao noso servicio”.

La Xunta y 33 empresas constituyen la sociedad mixta para proyectos energéticos, con 100 millones hasta 2027

–Pero hay una especie de reivindicación, el derecho a explotar los recursos propios.

–¿Una reivindicación? No. Es la consideración de que Galicia es rica en recursos, que tenemos una gran oportunidad y que su utilización de una manera distinta –que es lo que venimos a hacer–, puede repercutir en una mejora económica clara en el territorio.

–¿En qué fase está la empresa?

–Con la constitución del equipo. Nada se hace solo y ese es el reto fundamental. También iniciamos ya los contactos con promotores del sector energético y de todas las actividades en las que queremos estar presentes. Tenemos por delante un 2024 con muchas ganas. Nuestra intención inicial es participar en proyectos de hasta 300 megavatios en este primer año.

–Entiendo, entonces, que por el momento la empresa no entrará en proyectos mineros.

–Si hay un proyecto minero que respete los estándares de sostenibilidad con los que vamos a trabajar y entrando en ese proyecto garantizamos la máxima huella industrial, ¿por qué no? Estamos dispuestos a escuchar cualquier oportunidad, estudiarla y participar si los promotores comparten nuestra visión.

–¿Hay un mix fijado para los 300 megavatios en 2024?

–En principio serán de eólica. La hidroeléctrica es fundamental para nosotros por su carácter estratégico como almacenamiento, pero lo vemos más en el medio plazo por su tramitación.

–¿Hay conversaciones entonces con promotores que tienen parques eólicos autorizados?

–Autorizados, no autorizados o ya construidos. Somos una compañía flexible. Lo único inamovible es que, si participamos en un proyecto, el promotor debe compartir nuestra visión y encontrar en cada uno de los proyectos la forma en la que repercuta en la economía gallega.

–¿Qué cambia para un promotor tener a RDG como accionista?

–La compañía nace con un compromiso de aportación al capital social de hasta 100 millones en 2027 y seguir creciendo, abriéndolo a la sociedad gallega. Si un promotor necesita un socio solvente, nosotros lo somos. Y, además, un socio singular que tiene en su accionariado a la Xunta y 32 empresas; un socio local que puede aportar muchísimo valor; y muy exigente con la repercusión y los beneficios en el entorno. Si esos beneficios no son tangibles, va a ser muy difícil desarrollar todos los proyectos que hay en el sector energético.

Nuestros estándares de repercusión serán muy altos

–¿Manejan un porcentaje concreto para entrar en los proyectos?

–La idea inicial en los proyectos eólicos es entrar con una participación minoritaria pero suficiente para transmitir nuestra visión. No será lo mismo en proyectos hidroeléctricos, donde creemos que hay que tener una posición mayoritaria porque nos permitirá gestionar la energía de una manera distinta y ganar ventajas competitivas.

–¿Hidroeléctrica convencional o solo almacenamiento?

–Almacenamiento.

–¿En proyectos en trámite?

–O nuevos que surjan.

–¿Será comercializadora?

–Podemos llegar a comercializar electricidad, pero sin competir en el mercado. Una comercializadora de carácter instrumental para PPAs o para transmitir energía a precios competitivos a los ciudadanos del entorno de implantación de proyectos.

Podemos llegar a comercializar para PPAs y ciudadanos del entorno

–Es una de las fórmulas de las que más se habla, de compensar con recibos más baratos a los vecinos.

–Sin duda, trabajaremos en ese tipo de mecanismos. No renunciamos a ellos, pero pensamos también en una visión más amplia. Con el conocimiento global del mercado que tenemos, podemos garantizar que las pymes participen igualmente en el proyecto.

–¿Por qué nace la empresa antes de aprobar la ley que la crea?

–Una empresa como esta tendría sentido con o sin ley. Recursos de Galicia puede existir con el ordenamiento jurídico actual. Nace al amparo de la ley, eso es así, pero no es el único instrumento previsto. Llevamos año y medio trabajando en esto, creando equipo, involucrando accionistas... Cuando la ley se apruebe, nos aseguramos que este instrumento está rodado y funcionando.

–Personalmente, ¿qué objetivos se pone?

–Es una compañía que nace con la vocación de jugar un rol importante en el sector energético gallego.

–¿A largo plazo?

–A muy largo plazo. Y mis objetivos tienen que estar en línea con esa vocación. En 2027 estamos viendo una cartera de 1.200 MW y llegar a 40.000 hogares y a empresas importantes con una energía competitiva. Lo que a mí me dejaría realmente tranquilo es que sea un instrumento útil para la sociedad gallega.

–Dice Ignacio Rivera, líder de Hijos de Rivera, que un buen CEO debe centrarse en crear “buen rollo”. A usted le toca en el equipo y en un sector donde no abunda.

–Los entornos profesionales sanos son siempre buenos.

–¿Y en los sectores?

–Los sectores tienen que evolucionar acompasados con la sociedad.

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