La Guardia Civil licitará este año la construcción de una nueva patrullera oceánica. Dos años después de encargar el diseño a la oficina técnica Ghenova, que cuenta con una de sus sedes en Vigo, el Servicio Marítimo de la Benemérita aspira a contar con una unidad de entre 75 y 85 metros de eslora que sustituya a la Río Miño, en la recta final de su vida útil. La inversión prevista será de 33 millones de euros, según adelanta el portal especializado Infodefensa, y a su construcción aspirarán los principales astilleros del país, en especial aquellos que ya fabrican unidades similares como Freire Shipyard, Astilleros Armón o Astilleros Gondán.
Según Ghenova, que se adjudicó el diseño por 190.575 euros (IVA incluido), el buque ha sido diseñado para navegar en mares y condiciones meteorológicas adversas. Hará tareas de patrullaje en el mar territorial, zona contigua y aguas internacionales, para la represión del contrabando, control de la inmigración ilegal y vigilancia del cumplimiento de las leyes nacionales e internacionales.
El cuerpo de seguridad está en plena renovación de su flota, incluidos los barcos más pequeños, en las que participan los astilleros moañeses Rodman Polyships y Aister Aluminium Shipyard, que recientemente se adjudicaron dos unidades cada uno de poliéster reforzado con fibra de vidrio (PRFV) en un pedido total de casi 11 millones de euros (IVA incluido).
