Los proyectos de la Gran Praza y el desarrollo del centro concurrirán a fondos comunitarios

Con los proyectos de la estrategia Lalín Ssuma 21 materializados, el gobierno municipal se ha puesto a trabajar con el objetivo de lograr más financiación europea con la que ejecutar nuevas actuaciones en materia de desarrollo urbano. La Gran Praza, el proyecto estrella con el que el equipo de José Crespo concurrió a las pasadas elecciones es uno de los que se presentará al plan Estrategias Territoriales Integradas (ETI) y sobre él pivotará la humanización de la almendra central de la villa. El ejecutivo tiene ultimadas las actuaciones que, con la Agenda Urbana como herramienta fundamental para captar financiación comunitaria, concurrirán a las millonarias subvenciones de fondos FEDER que serán distribuidas por áreas territoriales en España en función de lo que técnicamente se denominan regiones más desarrolladas, en transición [ahí figura Galicia] y menos desarrolladas. La tasa de cofinanciación es distinta para cada una de estas áreas.

No es ningún secreto que el desarrollo de la Gran Praza es una de las apuestas para este mandato. Con la adquisición de los terrenos cerrada a mediados del año pasado por 2,57 millones y dos pagos efectuados, el desarrollo de una hectárea de terreno entre el templo parroquial y las plazas Igrexa y Vila precisa una importante inversión que las arcas municipales podrían soportar solo mediante una financiación a largo plazo. Por eso el gobierno tiene lista la documentación de un proyecto que aspira, por su filosofía, a conseguir parte de su coste en la estrategia comunitaria 2021-2027. Lo que está claro es que, como manifestó el alcalde en varias ocasiones, es que la Gran Praza es una actuación que posiblemente no se acometa en su totalidad en un mandato y por eso se desarrollará en fases. En caso que llegase dinero de Europa su ejecución y el desarrollo de la almendra central sería más sencilla de llevar a cabo por varias razones: el fuelle económico y el hecho de que se partiría con una fase inicial para, a continuación, incorporar otras intervenciones como la humanización de las calles que conforman el centro de la trama urbana. Consistiría en dotarlas de plataforma única y, con la Gran Praza, el edificio de usos múltiples de Rivero y el entorno de la Praza de Abastos, articular un nuevo modelo urbano con el dibujo de un plan de tráfico. La extensión de aceras en algunas de estas rúas implicaría la reorganización de la circulación o la supresión de plazas de estacionamiento en el caso de las más estrechas como Molinera o Rosalía de Castro.

Además de la humanización de rúas, proyecto que podría presentare dentro del desarrollo de la gran plaza central de la villa, hay otros pendientes como el del mercado de abastos que quedaron fuera al renunciar el ayuntamiento a una subvención de 1,1 millones de euros de concedida por el Gobierno de España a través del Programa de Impulso a la Rehabilitación de los Edificios Públicos (PIREP) por la imposibilidad de cumplir los plazos para justificar la obra. Con el proyecto hecho, el ejecutivo municipal apuntó semanas atrás que lo recuperaría para tratar de buscar financiación a través de otros programas comunitarios.

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