Arranca la temporada de caza de jabalí con batidas en los maizales

Los tecores descartan retrasar la campaña por las olas de calor / La proliferación de maleza dificulta la expansión de la caza menor

Uno de los jabalíes abatidos este fin de semana en los montes de Lalín. |   // CEDIDA

Uno de los jabalíes abatidos este fin de semana en los montes de Lalín. | // CEDIDA / Salomé Soutelo

Salomé Soutelo

Salomé Soutelo

Este sábado comenzó la temporada de caza mayor, que en el caso del jabalí estará abierta hasta el 25 de febrero del año que viene, y para los corzos, hasta el 14 de octubre en machos adultos en terrenos tanto de régimen cinegético común como especial. En los segundos, también se podrán cazar desde el 1 de abril hasta el 31 de julio de 2024, mediante rececho.

Este primer fin de semana de caza arrancó en Deza con un protagonismo de las cuadrillas de jabalí, ya que el corzo causa menos daños, al no haber en la zona grandes plantaciones de viñedo. Tampoco es recomendable cazar corzo con elevadas temperaturas, ya que en esta especie no se “acordonan” zonas donde los perros localizan al animal, como sí ocurre con el jabalí, sino que tienen que localizarlo en grandes superficies de terreno, por lo que los canes pueden enfrentarse a golpes de calor, como explica el presidente de la Sociedad de Caza de Dozón, José Rodríguez.

El rastro, mejor con lluvia

La cuadrilla de este tecor comenzó la temporada en terrenos próximos a maizales donde ya hizo destrozos el jabalí, como en O Sisto, Pidre y Pena de Francia. En Pidre la cuadrilla levantó una manada de cinco ejemplares el sábado, una jornada en la que la lluvia permitió un mejor rastro que el domingo, más seco y con temperaturas, como decíamos, muy altas. Anteayer en Pena de Francia se abatió una hembra adulta y se levantó un macho, que huyó herido. “Notamos que hay menos jabalí que en temporadas anteriores, pero en Dozón siempre pasa lo mismo: arrancas la campaña con poco ejemplares y conforme avanzan las semanas, vienen de otros tecores”, escapando también de las cacerías, explica Rodríguez.

La cuadrilla de jabalí de Dozón continuará durante las próximas semanas en el entorno de las plantaciones de maíz. Preguntado por si en un futuro podría retrasarse el inicio de la campaña, el presidente del tecor tiene claro que no, porque “siempre empezó en esta época para evitar más daños en plantaciones. Es más, yo incluso he pedido que se adelante”.

Igual que en Dozón, hay constancia de daños en maizales en varios puntos de Lalín. Sus cuadrillas solo cazarán esta especie los sábados, para no interferir en los entrenamientos de la caza menos, que comienzan en septiembre. Así, en la jornada de inicio de temporada se abatieron siete ejemplares, “y avistamos otros tantos”, apunta el presidente del tecor lalinense, José Luis Montoto. Así, ya comenzaron los destrozos en campos de Anzo o Barcia.

Piaras con hasta 12 crías

Año tras año las sociedades suelen cubrir el cupo de precintos inicial, e incluso piden ampliación. La movilidad que caracteriza al jabalí, así como su facilidad para reproducirse (con hasta 12 crías por parto) se ve ayudada por lo que conocemos como ‘monte viejo’. Son zonas que están sin desbrozar, donde prolifera la maleza y que sirven de refugio a jabalí, pero también al corzo y al lobo, “del que ya vimos ejemplares”, apunta Montoto. Sin embargo, los montes con excesiva maleza solo dificultan el asentamiento de especies de caza menor como el conejo y la perdiz. Del primero se realizaron ya siembras, y habrá repoblaciones de perdiz a finales de verano.

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