Crónica de una ruptura anunciada

En el próximo pleno que celebre Agolada (tendría que haber sido en noviembre, pero este Concello vive sin fecha en el calendario, como reza el bolero) se dará cuenta de una resolución de la Alcaldía que autoriza la solicitud del aún concejal del PP, Rafael Méndez, de pasarse al grupo de no adscritos.

Méndez formalizó esta petición hace más de un mes, el 25 de noviembre. Pero no hubo pleno y no trascendió. El PP sí lo sabía “desde hace semanas, pero es él quien tiene que dar explicaciones” de su ruptura” con un partido con el que simpatiza y colabora desde hace décadas.

Méndez explica que el detonante para irse del PP fue que la Xunta ignorase al municipio en los presupuestos de 2023, “pese a que el 85% de los vecinos de Agolada apoyó a los populares en las elecciones autonómicas”, recalca. Pero a nivel interno del PP agoladés, ya hubo roces antes. En abril, el partido celebró su congreso para escoger a la portavoz, Carmen Seijas, como presidenta. Méndez ya no figura en esa nueva ejecutiva. Después vendrían las polémicas por la feria de Agolada Rural el 12 de agosto.

Una comunicación que va a menos

Y mientras crecían las tensiones con sus compañeros del PP, aumenta el acercamiento al alcalde, Luis Calvo, y a PAyJ. Méndez insiste en que entiende su labor política (es la primera vez que ejerció de concejal) como una oposición que tiene que ejercer la crítica, pero que también debe felicitar aquellos aciertos del gobierno. Recuerda que en su perfil de la red social Facebook le dio a Calvo la enhorabuena por restaurar lavaderos y palcos de música, “pero también le recordé que antes estas dotaciones ya fueron construidas por otros gobiernos”, esgrime.

Asegura que la comunicación con sus compañeros del PP, cuando aún no había presentado su renuncia, fue yendo a menos “cuando les dije que había cosas en las que no estaba de acuerdo”. Por eso, rompió la disciplina de voto en el pleno de octubre, que también se celebró con semanas de retraso.

Al preguntarle si continuará en política en mayo, asegura que “no sé qué voy a hacer, tengo muchas proposiciones para seguir”. Una de ellas es del propio alcalde, Luis Calvo, pero descarta integrarse en PAyJ. “Tengo más opciones, pero me asusta que piensen en mí”, asegura. Añade que tampoco echaría en falta salir de la vida política, más que anda porque acaba de perder a su exesposa en el accidente del bus en Pedre, Cerdedo, y está pensando en montar un proyecto ganadero con su hijo, Darío. Explica que la política “precisa muchas horas de dedicación, y a veces los eventos políticos suelen ser por la tarde, coincidiendo con las horas de ordeño” de su ganado o con otras cuestiones como partos.

Seijas exige su acta de concejal

La portavoz del PP, Carmen Seijas, le exige a Rafael Méndez que en lugar de pasarse al grupo de no adscritos entregue su acta de concejal para que otro miembros de la lista (el siguiente sería Norberto Peiteado Asorey) pase a ocupar su puesto. “Si es coherente, no debería estar ni un minuto más ocupando esa acta, ya que los vecinos quisieron que el PP tuviese cuatro ediles en la oposición, y de esta forma estaría deslegitimando dicha decisión”, recalca. De hecho, tanto Rafael Méndez como la propia Carmen Seijas entraron en la corporación por las renuncias de Ramiro Varela Peón y de José Luis Costa Miguélez. “Eso nos hace aún más responsables de lo que tenemos entre manos, y debemos ser cuidadosos y respetuosos con quien confió en nosotros”.

La mano del regidor

Seijas tiene claro que detrás de este paso al grupo de no adscritos está la mano del regidor. “En los últimos meses está muy preocupado de dañarnos más que de gestionar, y día tras día se molestó mucho en tener una buena conexión con Rafael. En el último pleno hasta le dio turno de palabra, tratándolo así como un no adscrito, sin serlo”. Seijas remata asegurando que el grupo popular es un equipo “sólido, fuerte y con ganas de trabajar” para recuperar la Alcaldía.

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