Las parroquias de O Castro, Negreiros y Silleda perdieron ayer al que fuera su párroco durante las últimas décadas del siglo pasado y primeros años del presente. Julio Insua Villamayor falleció ayer a los 83 años de edad en la vivienda de Silleda que compartía con su hermana Manolita y de la que apenas salía en los últimos años debido a la enfermedad que padecía. “Ayer por la noche todavía cenó bien y, dentro de lo que cabe, estaba bien”, señala el actual párroco de Silleda, José Pérez Barreiro. Pero sobre las tres y media de la madrugada de ayer se puso mal y murió al mediodía.
Julio Insua Villamayor nació el 3 de agosto de 1939 en la parroquia lalinense de Noceda, en donde se crió junto a sus cinco hermanos, de los que otros dos también han fallecido. Apenas tenía 25 años cuando fue ordenado sacerdote, el 5 de junio de 1964, teniendo su primer destino como coadjutor de Santalla de Piquín, en el municipio lucense de Ribeira de Piquín. Dos años después, en 1966, pasó a ser ecónomo de la misma y encargado de la vecina San Xurxo de Piquín.
Hasta que en 1970 se asentó en Trasdeza, primero como ecónomo de San Martiño de Negreiros y San Mamede de O Castro, a las que sumaría, ocho años más tarde y de forma temporal, la feligresía limítrofe de Santiago de Breixa. En esta última se mantuvo hasta el nombramiento de Benedicto Iglesias Blanco, pero en las dos primeras ejerció como cura durante más de cuatro décadas.
En 1982, Julio Insua fue designado titular de la parroquia de Santa Eulalia de Silleda, en la que relevó a Vidal López Ferreiro, a quien sustituyó también al frente del colegio María Inmaculada. El mundo de la enseñanza no le era ajeno, ya que desde 1981 impartía clases de religión en el Instituto Ramón María Aller Ulloa de Lalín. Posteriormente fue asesor religioso en el colegio de EGB de Silleda.
El Obispado de Lugo le encomendó la parroquia de Santa María de Cortegada en el año 1986. En 1987 fue nombrado párroco in solidum y moderador de la unidad parroquial de Silleda, que incluía también las feligresías de Negreiros, Ponte y Taboada. De hecho, durante años, Don Julio –como era conocido entre sus feligreses– formó tándem con el párroco de Ponte, Luis Galego García, trasladado a Silleda al mismo tiempo. También tuvo como coadjutores a sacerdotes de la misión saletina de Siador. Y, de forma esporádica, llevó su parroquia natal de Noceda y las también lalinenses de Anzo y Madriñán.
Retirada
Hace ahora una década, Don Julio tuvo que dejar su labor como párroco principal de Santa Eulalia de Silleda por recomendación médica debido a sus problemas de salud. En septiembre de 2012 fue relevado por José Pérez Barreiro, con quien siguió colaborando un tiempo, además de mantener la iglesia de Negreiros junto a José Catanga, quien le relevaría definitivamente. El 20 de octubre de ese mismo año recibió un homenaje popular organizado por la Cofradía de Los Dolores de Silleda, que le nombró cofrade de honor. En 2014 participó en los actos organizados por la Diócesis de Lugo con motivo de sus bodas de oro sacerdotales.
Los restos mortales de Julio Insua Villamayor están depositados en el Velatorio O Deza, desde donde serán conducidos en la tarde de hoy (17:30 horas) hasta la iglesia parroquial de Silleda para la celebración de los funerales de cuerpo presente. Seguidamente, se procederá a su inhumación en el panteón familiar del cementerio de Santa María de Noceda.
