"Si pudiese, el suelo industrial lo pondría gratis y lo pagaba desde el Concello por el retorno social que tiene el empleo", declaró el regidor. En este sentido, aseguró que, tras numerosas reuniones en la Xunta, la cuarta fase de Lalín 2000. Crespo puso en valor los encuentros con Xestur, a los que fue acompañado por el técnico municipal Javier Bugallo, porque han servido, dijo, para buena una planificación conjunta.

Un 40% más barato

Con el rediseño de este espacio empresarial su coste se reduciría un 40%, una vez que el Concello ha pedido acotar al máximo los espacios verdes o no solicitar reservas de espacios municipales, con lo que el importe de la urbanización de esta fase del parque sería mucho más bajo. "Ya tenemos un miniborrador y a ver si damos avanzado pronto. Me consta que la consellería está trabajando y a ver si tenemos una propuesta lo antes posible", declaró. Además, apuntó que con la aprobación del plan parcial y de sectorización, la Xunta ya había adquirido en torno al 55 por ciento de los terrenos de esta 4º fase y el resto serán obtenidos vía expropiación. Aunque ayer no lo apuntó, Crespo había dicho en anteriores ocasiones que apostaba por un desarrollo gradual del recinto.

El alcalde arrancará la próxima semana con una agenda completa. Para mañana está convocada una reunión con el comité de empresa para presentarle a los representantes sindicales un esbozo del presupuesto municipal del próximo año. Asimismo, se dará traslado de cómo se pretende acometer la nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT) municipal, también para el Padroado Cultural, aunque en este caso se apostará por lo que se denomina técnicamente un catálogo de puestos de trabajo. Mediante esta vía se podría desatascar la contratación de profesorado para el conservatorio en las especialidades de trompa, trompeta y fagot. El mandatario local manifestó que estos pasos no fueron comunicados antes al comité de personal porque quería tener el trabajo avanzado.

El lunes Crespo tiene dos actos más: una reunión con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para repasar todas las demandas solicitadas tras haber llamado a la puerta de buena parte de las consellerías del gobierno autonómico. Y también está prevista la celebración, tras varios años, de la junta local de seguridad, con la presencia en la localidad de la subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba.

Otra de las reuniones tendrá lugar en Madrid, en concreto en las dependencias del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) para interesarse por varias cuestiones. Seguro que una de ellas será el desbloqueo a la catalogación del hallazgo en el Castriño de Bendoiro, tras una década sin avances y que esta semana ya dijo que pretendía avanzar en este sentido. Las otras dos, aludidas expresamente por el munícipe en su comparecencia de ayer, son viejos anhelos, uno con mayor dificultad de materializarse que el otro. La cesión de las escombreras del Tren de Alta Velocidad (TAV) no acaba de cerrarse tras más de un lustro largo y Crespo tratará de persuadir a representantes del departamento dependiente del Ministerio de Fomento que permitan el traspaso de algunos de estos terrenos al Concello para distintos fines. El otro, que depende de la generosidad del Gobierno central también es una casi demanda que no fue atendida desde Madrid con gobiernos de distinto signo político: la construcción del apeadero del tren de alta velocidad en Botos. El alcalde desea dar otro arreón a una solicitud que para que se materialice precisa de una inversión millonaria, pero a su juicio el transporte ferroviario será fundamental para gallegos y dezanos en particular cuando la vía rápida conecte el noroeste con la capital española. "En un mes aproximadamente el viaje en tren a Madrid desde Ourense se recortará hasta las tres horas y después este trayecto será de dos horas y media, con lo que no compensará ir en avión", manifestó, tanto por razones de tiempo como del coste del desplazamiento.

Cines

Como ya cabía esperar, el Concello impondrá otra sanción a la empresa que ejecutó las obras en la Praza de Galicia por incumplimiento de plazos -se hará lo propio con la de Calvo Garra- y tras la visita de técnicos municipales y de la UTE se está analizando las deficiencias en la actuación. Por otro lado, Crespo confía en que el interés de empresarios por las salas de cine del centro comercial Pontiñas pueda materializarse y que la localidad disponga de esta infraestructura de ocio. La propiedad de las salas, el precio de la comunidad del espacio comercial que la actividad sea rentable son los principales escollos.