O.M.A. ya fue condenado en 2015 a un año de cárcel por un cho similar, pero no tuvo que ir a prisión por carecer de antecedentes. En esa ocasión, el cruceño fue condenado por estafar a una empresa de Albacete, a la que había comprado tres tractores de segunda mano que después intentó abonar con varios pagarés que, al igual que los que entregó a empresarios dezanos, tampoco tenían fondos.

Los hechos se remontan a 2010. Por entonces, y como representantes de la empresa que tenía de ganado y con sede social en Lalín, le compró a la firma Caminos y Repoblaciones SL esos tres tractores usados, por un importe total de 11.600 euros. Tras producirse el primer impago, "y queriendo aparentar su voluntad de pagar el precio de los vehículos adquiridos", el acusado entregó otro pagaré, perteneciente a otra sucursal bancaria distinta. Así las cosas, el vendedor denunció los hechos en la comisaría de la Policía Nacional.

El acusado no compareció al acto de juicio, aunque admitió en la fase de instrucción que había comprado los tractores y que entregó un cheque y un pagaré, de los que "desconocía que no tuvieran fondos". Dos testigos coincidieron en que el acusado ni había pagado los vehículos ni tampoco los había devuelto.

La Fiscalía, al entender que el acusado cometió un delito de estafa, pedía un año y ocho meses de prisión, frente a los dos que solicitaba la acusación particular. Además de la pena de un año, fue condenado a abonar los 11.600 euros e intereses legales.