El edil de Obras de Lalín, Francisco Vilariño, anunció la remodelación de los palcos de la fiesta de las parroquias de Moneixas y Vilanova, en unas actuaciones a las qe se destinarán 41.679 euros. Con este proyecto se da respuesta a una vieja demanda vecinal trasladada en reiteradas ocasiones al Concello, pues las estructuras de ambos palcos presentan estados de conservación muy malos y sufren graves daños estructurales que impiden un uso adecuado e incluso representan un riesgo por peligro de desplome.

En el caso de Moneixas, el palco está muy deteriorado, con la cubierta vencida en la parte central debido a su tipo de estructura, así como a su espesor. Igualmente, se puede apreciar la oxidación de los elementos metálicos y la existencia de pronunciadas grietas en el muro. La estructura corre riesgo de colapso sin aviso previo, lo que hace necesaria su reparación, principalmente por motivos de seguridad. Las obras que se van realizar son claves para obtener un aprovechamiento óptimo del palco, de modo que su remodelación permita que vuelva estar tras años plenamente operativo y ser empleado por los vecinos para actividades lúdicas sin peligro. La actual estructura será demolida, tanto en la parte de la cubierta como en el cierre perimetral, conservando solo la base. Posteriormente se reconstruirá con bloque de hormigón en los muros y estructuras metálicas de la cubierta. Como particularidad, en esta remodelación se va a ejecutar un cierre central retráctil que permitirá un doble aprovechamiento del palco, puesto que los vecinos podrán emplearlo también para el almacenamiento de materiales.

El palco de Vilanova está en una situación muy semejante, con daños estructurales que amenazan con su desplome. La estructura padece vencimientos en la cubierta y oxidación en los elementos metálicos, además de profundas grietas en el voladizo de la parte trasera que pueden provocar un colapso sin aviso previo, motivo por el que hay una necesidad imperiosa de arreglo. Para su reparación se procederá a la demolición completa de la construcción, excepto de su base, con posterior reconstrucción con muro de hormigón y cubierta de chapa de acero. Una vez realizados los arreglos el palco quedará plenamente operativo para uso y disfrute público, sin suponer un riesgo para a integridad de los vecinos.

Vilariño revisó los palcos con los alcaldes de Moneixas y Vilanova, Beatriz Fernández e Manolo García, a los que les detalló las actuaciones. Hizo hincapié en que se trata de unas obras muy demandadas que se van a llevar a cabo por la necesidad parroquial de emplear estas edificaciones para usos lúdicos, pero también por motivos de seguridad, debido al estado deplorable en el que se encuentran ambas infraestructuras.