balonmano - Primera Nacional

El Disiclín saca un notable en la primera vuelta

Pablo Cacheda dice que fueron “de menos a más” mostrando su ADN combativo

Pablo Cacheda imparte instrucciones durante un tiempo muerto en el Lalín Arena. |  // BERNABÉ/JAVIER LALÍN

Pablo Cacheda imparte instrucciones durante un tiempo muerto en el Lalín Arena. | // BERNABÉ/JAVIER LALÍN / Ángel graña

Pablo Cacheda está contento con la primera vuelta del Disiclín Balonmán Lalín. “Creo que el equipo no llegó a mostrar una regularidad durante esta primera vuelta, pero es normal al tener una plantilla mucho más joven y con unas lesiones que nos lastran semana tras semana. El resumen que yo haría es que fuimos de menos a más”, explica el entrenador lalinista.

Azurmendi y Arón alzaron ayer el telón a las jornadas de tecnificación. |  // BERNABÉ/LUCÍA ABELEDO

Azurmendi y Arón alzaron ayer el telón a las jornadas de tecnificación. | // BERNABÉ/LUCÍA ABELEDO / Ángel graña

Defensa mejorable.

Los del Arena están pagando el no contar con jugadores con físicos notables. Cacheda reconoce que “a los jugadores que menos tiempo llevan les cuesta adaptarse a una defensa móvil y que propone”. El técnico subraya que “si nos vamos a la defensa habitual que hacen muchos equipos, nosotros no tenemos armas para defendernos”. Jugadores como Xabi Batán o Adrián Ferradás en el avanzado tienen cada vez un papel más importante en el equipo, aunque su entrenador destaca que “tienen mucho que aportar al equipo pero también necesitan adaptarse a lo que propongo y eso lleva un tiempo”. En este sentido, la segunda parte de Cabral podría servir perfectamente como pauta.

Ataque posicional.

Cacheda señala que, aunque está costando resolver en el ataque posicional “es cierto que con la velocidad y el tema del contragolpe vamos llevando los partidos a guarismos que nos van mejor. Ya que nos cuesta tanto defender, por lo menos meterle velocidad para que se produzcan más ataques y vayamos sumando oportunidades de hacer goles”. En este aspecto del juego, destacan por encima de los demás tanto Tate como Román, que son los dos jugadores que llevan el peso ofensivo y “sobre los que montamos el engranaje. Son jugadores que ayudan a un buen rendimiento”. Para Cacheda “entre lo determinante que es Tate en la categoría y lo bien que entiende el balonmano y lo bien que nos entendemos Román yo, para mí es muy fácil que él lleve el ritmo de los encuentros intentando darle soluciones y por ahí va un poco la clave de que a nivel defensivo vayamos mejorando”.

El fichaje de la temporada.

La llegada de Víctor al equipo se convirtió este verano en el único fichaje del Disiclín. Su entrenador enfatiza que “es un chico muy joven, que va a cumplir sus 18 años en su primer año de Sénior y también creo que va creciendo”. En este sentido en el vestuario rojinegro el jugador es conocido por su pasión por el balonmano. “Además se interesa y hace todo lo posible por mejorar día a día y creo que, por ejemplo, a nivel defensivo ya está ofreciendo un rendimiento mucho mejor que a principio de temporada, aunque a nivel ofensivo sí que le cuesta más”, apunta el responsable técnico del conjunto del Arena. Cacheda destaca que el pivote es un puesto clave y que por lo tanto el asturiano tiene “que controlar muchas cosas”. De todas formas, el entrenador del Disiclín piensa que “es un jugador que si estos años que va a estar estudiando en Santiago sigue en la línea en la que se encuentra, e interesado en crecer con nosotros, acabará dándonos un rendimiento importante porque cuenta con unas condiciones físicas diferentes”.

Lucha en equipo.

Es para Cacheda una de las claves que explica la situación actual del Disiclín. “Si algo nos caracteriza, y a pesar de todo el cambio generacional que hubo, es la garra y no dar ningún partido por perdido”, afirma. El técnico hace memoria para indicar que “vimos al equipo por momentos perdiendo de 9 goles y acabando por apretar el resultado” como pasó en Lanzarote donde los del Arena redujeron la diferencia. Al respecto, Cacheda es tajante: “En ese aspecto el ADN del club no se pierde y los jugadores que vienen de abajo también tienen esa lección aprendida”. Se trata del aspecto que más hay que felicitar a un equipo que quiere seguir yendo de menos a más.

Clases magistrales con figuras de la cantera

Los principales productos de la academia rojinegra en la diáspora vuelven a casa por Navidad. Y lo hacen echando una mano en la labor de formación de la entidad. Así, jugadores como Javier Azurmendi, Arón Díaz, Xoán Ledo, Tomás Villarroel, Brais González, Tamara Seijas, Dani Ramos y Cecilia Cacheda se encargarán de liderar unas jornadas de tecnificación para los canteranos lalinistas. Las sesiones empiezan a partir de las 16.30 horas sobre el parqué del multiusos lalinense. Azurmendi y Arón alzaron ayer el telón de estos clinic con uno sobre extremos. Los destinatarios fueron los alevines 2012, los infantiles 2010 y 2011, cadetes masculinos y juveniles masculinos y femeninos. La segunda jornada tendrá lugar hoy, a partir de las 16.30 horas, con una sesión dedicada a la portería. Tomás y Xoán Ledo tendrán a su cargo a los alevines 2012, infantiles 2010 y 2011, los cadetes femeninos y masculinos, al igual que juveniles masculinos y femeninos. Las jornadas de tecnificación del Balonmán Lalín continuarán mañana con una clase magistral de laterales como Tamara Seijas y Brais González. Con ellos estarán los alevines 2012, los infantiles 2010 y 2011, cadetes masculinos y femeninos y juveniles masculinos y femeninos. El evento descansará el último fin de semana del año para regresar el martes día 2 de enero. Será el turno para Dani Ramos y Cecilia Cacheda, con una sesión dedicada a los puestos de central y pivote. Alevines 2012, infantiles 2010 y 2011, cadetes masculinos y femeninos, y juveniles de ambos sexos volverán a ser los principales beneficiarios de unas jornadas de tecnificación organizadas en estas vacaciones navideñas por la entidad presidida por Belén Mariño.