Fútbol

El Rápido urge una solución

El club informa del cierre del Pujales a una nutrida representación de las quinientas familias de sus canteranos y exige al Concello de Vigo un plan que permita al menos el uso del campo en menos de 15 días

Rafa Caro y Alfonso Caneiro, antes de que se iniciase la asamblea con las familias.

Rafa Caro y Alfonso Caneiro, antes de que se iniciase la asamblea con las familias. / José Lores

Armando Álvarez

Armando Álvarez

El Rápido urge una solución inmediata a la clausura del Baltasar Pujales. El club boucense ha reubicado a sus 40 equipos durante las dos próximas semanas para entrenamientos y partidos. Un remedio puntual, que no puede prolongarse. Los aurinegros esperan que el Concello les aclare hoy o mañana qué obras acometerá para garantizar la seguridad de la instalación y cuánto durarán. Esos datos determinarán los próximos pasos. Así se certificó ayer en la multitudinaria asamblea informativa que la directiva organizó con las familias de sus canteranos.

La oscilación violenta de una torreta de iluminación del Pujales, el pasado fin de semana, ha provocado fortuitamente el estallido de una situación larvada desde 2019. Los bomberos solucionaron ese problema puntual pero también se percataron de las graves filtraciones de agua en la grada. Su informe provocó la visita el lunes de un arquitecto municipal, que decretó el cierre.

Aunque el Rápido todavía no ha recibido el informe oficial, el propio club lleva cuatro años remitiendo correos con soporte fotográfico en los que retrata las inundaciones de las dependencias inferiores (oficinas, vestuarios) y los agujeros de la cubierta. Es este último defecto el que ha precipitado el cese de actividad. La corrosión de partes de la chapa, a juicio del arquitecto, provoca riesgo de desprendimiento.

Abel Caballero se comprometió a ejecutar una reforma integral de la grada en la presentación de la temporada 22-23. Y al Rápido le consta que existe ese proyecto, pero todavía no se ha iniciado el proceso de licitación. Será la solución definitiva. Pero el club necesita un alivio inmediato que permita la reapertura al menos del campo, aunque no haya vestuarios o se empleen portátiles. Desde el Concello también apuntan a obras rápidas que se centren en garantizar seguridad de los usuarios. Pero ayer aún no se había concretado en qué consistirán y sus fechas.

El salón de actos del Círculo de Empresaios se abarrotó.

El salón de actos del Círculo de Empresaios se abarrotó. / José Lores

Esta es la situación que ayer expusieron el presidente del Rápido, Alfonso Caneiro; el vicepresidente, Rafa Caro; y el directivo Roberto Barcia. Los tres quisieron dar explicaciones a las familias de sus canteranos. El Rápido posee 40 equipos, con 500 niños y niñas. La asistencia a la asamblea fue masiva. Prevista en principio en el Liceo de Bouzas, se trasladó al salón de actos del Círculo de Empresarios para disponer de un mayor aforo. El local, pese a todo, se abarrotó con más de 300 personas en asientos, pasillos e incluso el vestíbulo.

“Queremos que estéis tranquilos”, pidió Caneiro, que certificó: “Vamos a priorizar a la cantera. Hemos exiliado al primer equipo a Cangas para que los juveniles puedan jugar en el Federativo de Coia”. De hecho, el Rápido debería recibir al Celta C Gran Peña en O Morrazo este domingo a las 19:00, pero se han encontrado con un problema de luz en el campo cangués. Caneiro se planteaba pedir el aplazamiento. En la Federación Gallega ayer aparecía programado el partido en el Federativo, el domingo a las 16:00.

No se han aplazado los partidos de los otros 39 equipos. La Federación Gallega no lo ha considerado posible. Y los coordinadores del club han trabajado con denuedo en las últimas horas para capear lo urgente. Distribuirán durante dos semanas a las escuadras por Beade, Montecastelo, Apóstol y Federativo. Con menos horas de entrenamiento e intempestivas, en algún caso. “El club os pide que aguantéis un poco la incomodidad”, rogó Caro.

La asamblea se celebró ciertamente en un clima sereno, aunque crítico con lo que se entiende como dejadez del Concello. Pero se admite una tregua hasta que los gestores municipales descubran su hoja de ruta. Caneiro advierte que la recolocación en otros campos, cuyo alquiler deben sufragar, no se puede prorrogar. “Económicamente es un problema terrible. Y perdemos cantina y taquilla”.

“Vamos a dar un margen de confianza. En función de eso, veremos qué decisiones tomamos”, estableció Caro. “Trabajamos en la línea de tener una respuesta inmediata del Ayuntamiento, que no tenemos a día de hoy. Queremos pensar que por lo que es el Rápido, lo que mueve a nivel de masa social, el Concello hará frente a las obras que tiene que hacer”.

Roberto Barcia había estado por la mañana con arquitectos municipales. No le han aclarado plazos: “Depende de la meteorología y de la maquinaria”. El dirigente se manifiesta “optimista”. Añade: “Creo que en quince días se podrá entrenar y jugar en el Pujales. Si no, no hay viabilidad. Pero ellos (en el Concello) están también presionados”.

Rafa Cano, Alfonso Caneiro y Roberto Barcia.

Rafa Caro, Alfonso Caneiro y Roberto Barcia. / José Lores

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El presidente aurinegro agradece el talante “colaborativo” que las familias de sus canteranos han exhibido en estas horas procelosas y singularmente en la reunión. “Completamos el aforo de 200 personas, había gente de pie, otra no pudo entrar...”, calcula. Siente que se ha escenificado la cohesión de las quinientas familias en su apoyo a la entidad: “Se ha visto el poder de convocatoria del Rápido. Tenemos una fuerza enorme”. Caneiro espera que esta demostración de músculo le abra las puertas principales del Concello. “He pedido una reunión con el alcalde. Espero que nos la dé. He hablado con el concejal (Manel Fernández) un par de veces y me dice que hay intención de resolverlo rápidamente pero no me da fechas tampoco. El alcalde lo va a resolver, evidentemente”. Una fe que vacila, porque a la vez reconoce: “Yo no soy demasiado optimista. El pabellón de al lado lleva un año cerrado por filtraciones de agua”. E insiste en que la contingencia trasciende la incomodidad de las reubicaciones o los aplazamientos. “Si este problema se prolonga, ¿qué hacemos? La propia existencia del club se pone en peligro”. La trascendencia social del Rápido puede ser una baza a jugar. Algunos padres ya apuntaron ayer ideas para explicitar su indignación: entrenamientos en Praza do Rei, protestas en la inauguración del alumbrado navideño... La directiva ha pedido que se aplace cualquier manifestación pública hasta que las autoridades municipales revelen su plan. “Si la semana que viene no tenemos una solución, tendremos que tomar otras medidas. La próxima semana es clave. Os convocaríamos otra vez”, anunció Caneiro a los presentes. Se compromete: “Si tenemos que hacer presión, la haremos entre todos”. Caneiro reveló durante su intervención que los presidentes de Pontevedra y Alondras habían ofrecido su ayuda. Solo le sirve en el caso morracense con el primer equipo. “No podemos enviar a la cantera a entrenar a Cangas o Pontevedra”. Pero agradece el gesto en la misma medida en que lamenta el silencio de sus homólogos vigueses. “Nos podía haber llamado alguno de los otros clubes y echarnos una mano. A día de hoy no lo ha hecho nadie”. Él, por su parte, ha probado otros acomodos alternativos. Preguntó por la ETEA, que ya había tanteado hace tiempo para ampliar la infraestructura del club. Imposible, le ha dicho el concejal, por la caída de un árbol y problemas de alumbrado. “El CUVI es otra opción”, indicó. Un asistente le habló del campo de Santiaguiño, en Chaín. Y Caneiro apunta: “Voy a hablar con el Celta”.

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